Deja pérdidas millonarias la copia del contenido de bandas magnéticas de tarjetas crédito
Comarca Lagunera.- La amenaza fantasma está a la orden del día. En su ataque, los “clonadores” de tarjetas utilizan el factor sorpresa, el abaratamiento de las tecnologías y la ignorancia de las autoridades para actuar. La “guerra clónica” rebasa los límites: instituciones bancarias y tarjetahabientes sufren los estragos y se reacomodan para no perder la batalla.
Al hablar de la “clonación” de tarjetas, se puede pensar en una réplica idéntica del plástico. La realidad indica que la conducta delictiva busca copiar el contenido de la banda magnética, donde reside toda la información de la cuenta.
2003 fue el año de los “clonadores” de tarjetas, preferentemente de crédito, una red internacional de defraudadores venezolanos actuó en diferentes partes de la República Mexicana. El domingo 21 de marzo, fue desmembrada una banda de “clonadores” extranjeros que operaba en Monterrey, Nuevo León.
La detención de los venezolanos en una ciudad importante y tan próxima a la Comarca Lagunera, invita a encender luces de alerta para los tarjetahabientes y evitar verse sorprendidos con cargos a su estado de cuenta, por compras jamás realizadas.
Para dar a conocer las medidas fundamentales de seguridad en este rubro, Guillermo Quintero Rodríguez, delegado en Coahuila de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), cita una serie de recomendaciones y acuerdos fijados por la Comisión a nivel nacional.
En el presente año, la delegación estatal de la Condusef ha recibido 72 casos de quejas o denuncias por retenciones o cargos a tarjetas de crédito por servicios no solicitados. Casi la totalidad de los afectados reside en la Comarca Lagunera de Coahuila y algunos casos son del vecino Estado de Durango.
A nivel nacional, la Condusef emitió ya una recomendación a 20 instituciones bancarias con el propósito de que incluyeran dispositivos o módulos de seguridad en sus equipos que eviten la retención de las tarjetas.
La medida obedece al análisis realizado a los equipos automatizados, donde se detectó que el origen de la problemática se debió a actos fraudulentos perpetrados por bandas de delincuentes organizados que actúan cuando los usuarios acuden a un cajero a retirar efectivo y al introducir la tarjeta en la lectora del equipo, ésta fue retenida.
Mientras las recomendaciones y las nuevas técnicas de seguridad son aplicadas, los tarjetahabientes deben atender los mecanismos clásicos de los “clonadores”, a la hora de atacar a sus víctimas para luego despojarlas de sus bienes, mediante la utilización de su línea de crédito.
Los fraudes
En la experiencia de los jefes policíacos de la región, en base a la atención de los hechos y denuncias por delitos cometidos por “clonadores” de tarjetas, se determina que al menos hay cuatro formas de fraudes.
El primero se basa en la obtención del Número de Identificación Personal (NIP); el segundo renglón es ocupado por las tarjetas perdidas o robadas; también existe la duplicidad en el cobro de una misma transacción en un establecimiento y por último, las falsificaciones.
Gilberto Estrada Quiñones, comandante regional de la Policía Ministerial, informó que los fraudes con las tarjetas de crédito se pueden cometer con el plástico original o con una tarjeta apócrifa. Lo que importa es el contenido de la banda magnética.
Los propios cajeros automáticos son el escenario ideal de los “clonadores”, quienes mediante el uso de microcámaras ocultas, pueden grabar la marcación del número de identificación personal, no sin antes sabotear la ranura de la máquina que imposibilitará al usuario a realizar su transacción.
Otro tipo de fraude que ya no es tan común en el medio, ocurre en el establecimiento comercial que no cuenta con una terminal electrónica portátil y que obliga a “planchar” la tarjeta para emitir el comprobante, es posible que se genere más de uno y hacerlos efectivos con una firma falsificada.
En sus primeras intervenciones, los “clonadores” bloquean las ranuras de los cajeros con material que puede captar la información de la banda magnética y después, haciéndose pasar por empleados de mantenimiento o funcionarios del banco, piden al usuario que teclee su clave y luego lo invitan a intentar la operación en otro cajero remoto.
Las bandas
Los “clonadores” operan en toda la República, incluso en septiembre de 2003, estuvieron en Gómez Palacio, donde fueron capturados cuatro venezolanos, que aprovechando la ignorancia y el contubernio de las autoridades, recuperaron su libertad sin ningún contratiempo.
Integrantes de la banda internacional de “clonadores” de tarjetas de crédito y débito, aprehendidos en Mexicali, fueron consignados ayer al Juzgado Quinto de lo Penal, por el delito de robo calificado y asociación delictuosa.
Los estafadores se habían robado ocho millones de pesos, en 38 diferentes fraudes cibernéticos, informó el subprocurador de zona en Mexicali de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Javier Guadalupe Salas Espinoza.
Agentes del Grupo Bancario y de la Unidad Orgánica de Robos y Asaltos de la PGJE, detuvieron en flagrancia a integrantes de la banda cuando intentaban colocar un aparato en un cajero para “clonar” tarjetas.
En Veracruz, agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP) detuvieron a elementos de una banda de “clonadores” de tarjetas de crédito de origen venezolano en la autopista Tinajas-Cosamaloapan, al sur del Estado, informó a la AFP el comandante Arturo Herrera Valle.
“Es una banda internacional. Traen sus pasaportes, traen visas de varios países. Se les recogió su equipo de cómputo, su equipo para trampear lo que son los cajeros automáticos y una lista muy extensa con números de tarjetas de crédito que supuestamente ya “clonaron” para sacar dinero de los cajeros automáticos”, dijo el jefe policíaco.
En Guanajuato son casi 20 personas las afectadas por los “clonadores” de tarjetas. La Procuraduría de Justicia ordenó al Departamento de Averiguaciones Previas investigar a personal y funcionarios de las diversas instituciones bancarias, para determinar quién o quiénes están “clonando” tarjetas de débito y crédito.
Al inicio de 2003, elementos de la Policía Municipal lograron la detención de cuatro personas que integran una pequeña banda de “clonadores” de tarjetas de crédito. Los detenidos son originarios de la ciudad de Guadalajara, Jalisco.
En Chihuahua se registra un aumento considerable en denuncias por robos a partir de la “clonación” de tarjetas y la actividad se incrementa en las vacaciones.
Los fraudes con tarjetas de crédito dejan pérdidas millonarias a las instituciones bancarias, afectan fuertemente la industria local, sobre todo la restaurantera y provocan una verdadera crisis, tanto emocional como económica, en los usuarios, sin embargo, no es tipificado como delito grave en Chihuahua.
En julio de 2003, el Juzgado Tercero de Distrito con sede en Yucatán, dentro de la causa penal 41/2003, dictó auto de formal prisión en contra de Daniel Enrique Méndez Hurtado, por su probable responsabilidad en la comisión del delito de portación y uso de tarjeta de crédito falsa, previsto y sancionado en el artículo 112-Bis fracción 2, de la Ley General de Instituciones de Crédito.
El combate
Guillermo Quintero, delegado de la Condusef, reconoce que ya fue rebasada la función de la banda magnética como dispositivo de seguridad para guardar información confidencial. “Ahora las tarjetas con chip son la nueva alternativa, aunque se corre el riesgo de ser alcanzada por los delincuentes de nuevo”.
En 2004, algunas instituciones bancarias del país ya realizan pruebas con tarjetas adecuadas al chip y se busca dar mayor seguridad al tarjetahabiente, impidiendo que la “clonación” se lleve a cabo, al cambiar la información almacenada en cada transacción que se realice.
A la par de la citada medida encaminada a ganar la guerra a los “clonadores”, también se cuenta en algunos bancos con sistemas de monitoreo de transacciones en línea, llamados Redes Neuronales, que conocen el comportamiento de los tarjetahabientes y permiten detectar variaciones en el uso de la tarjeta, lo cual le da la oportunidad al banco de detener el fraude a tiempo.
Quintero Rodríguez señala que la coordinación de las medidas citadas permitirá dejar fuera de la jugada a los integrantes de las bandas internacionales que en los últimos cinco años, han aprovechado el abaratamiento de los dispositivos para copiar una cinta magnética.
La postura es importante, considerando que los “clonadores” ya manejan dispositivos, que son muy pequeños, incluso camuflados en un biper, una computadora portátil o cajetillas de cigarros; los traen en sus bolsillos y los pueden desaparecer en caso de verse descubiertos.
En general, el delegado de la Condusef recomienda a los usuarios de las tarjetas de crédito, estar pendientes del plástico a la hora de efectuar un pago en un restaurante o en un centro comercial, no permitir que la tarjeta sea deslizada más de una vez, y tampoco perderla de vista.
Servicios de seguridad
Como un apoyo a los tarjetahabientes que pueden ser blanco de los “clonadores”, la revista de cultura financiera “Proteja su dinero”, elaborada por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, describe la última novedad en materia de seguridad.
Serán los usuarios que tienen una cuenta de ahorro y cheques en el BBVA Bancomer y un celular Telcel, quienes podrán contratar el servicio denominado “Alerta Bancomer en tu celular”, que les permitirá mantener el control de los movimientos de cuentas, enterarse a tiempo de alguna irregularidad y detectar fraudes de forma inmediata.
El cliente debe contratar el servicio avanzado que tiene un costo de 25 pesos mensuales y darse de alta sin costo adicional, agregando su número celular.
Una vez hecha la contratación, el usuario decidirá a partir de qué monto depósito a su cuenta y gastos en su tarjeta de débito, debe ser avisado de forma inmediata, lo cual se hará mediante un mensaje que cuesta un peso.
El monitoreo es las 24 horas y en el peor de los casos, su tarjeta es “clonada” y se hace una compra de cinco mil pesos, cuando el límite es de tres mil, al ser avisado de forma inmediata, puede cancelar su tarjeta y evitar que se siga haciendo uso indebido de ella.
