EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Un año transcurrió y el crimen sigue impune. La familia Ruelas Salcedo no ha recibido respuesta favorable de las nuevas autoridades. En el Juzgado Segundo del ramo penal, está pendiente la resolución sobre nuevas pruebas aportadas por la defensa de la víctima. El asesino sigue libre.
El procurador de Justicia del Estado de Durango, José Luis Carrillo, no ha pronunciado su postura ante el crimen pendiente por resolver, que se caracteriza por altibajos en el desarrollo del proceso penal. La sociedad exige respuestas.
Norma Ruelas, hermana de la finada y vocera de la familia, informó que a un año del homicidio, se oficiará una misa en memoria de Adriana y durante la siguiente semana esperarán la resolución del Juzgado Segundo, sobre la radicación de los nuevos elementos de prueba contra los probables autores del asesinato.
Fue el 12 de agosto del presente año, cuando la familia Ruelas Salcedo convocó a los medios de comunicación para presentar la postura de su nueva defensa, a cargo de los abogados, Ariel López Haro y Ramón Rodríguez.
Los abogados confían en que las nuevas autoridades den un giro al caso y que se admitan los elementos de prueba y se considere el señalamiento de los testigos para que se obsequie la orden de aprehensión contra los presuntos responsables.
Como se informó oportunamente, la mayoría de los integrantes de la familia de Adriana Ruelas, señalaron en su denuncia que, Ubaldo Nájera Gandarilla, esposo de la finada, la había amenazado de muerte diez días antes del crimen, además de que se vería beneficiado en la posesión de bienes del matrimonio.
En la presunción sobre la responsabilidad de Artemio Nájera Gandarilla y Jacinto García Cháirez, quienes estuvieron arraigados durante 28 días, la defensa exige la confrontación con las víctimas.
El tráfico de influencias es el concepto con el que define la familia de Adriana Ruelas, la dilación en la justicia y la impunidad que reina en el caso.
La defensa de la familia indicó que se agotan los canales adecuados y esperan en tiempo contar con la apertura para tener los elementos necesarios en la aceptación de pruebas.
La familia de la víctima tenía esperanza en la resolución del crimen antes que terminara la pasada administración estatal. Ahora, esperan que las nuevas autoridades, retomen el caso y busquen todos los medios para que se sancione a los culpables en el crimen que conmocionó a la sociedad el 26 de septiembre de 2003.
El asesinato
Como se informó en su oportunidad, a las 12:05 horas, la prima y comadre de Adriana Ruelas, la descubrió herida de muerte en el pequeño cuarto habilitado como consultorio de la óptica de su propiedad, la cual fundó hace año y medio.
Los hechos ocurrieron en el local ubicado en la calzada J. Agustín Castro 1100 norte, a donde llegaron agentes y decenas de curiosos; también arribaron el padre, esposo y demás familiares de la infortunada Adriana Dolores de 42 años.
Acordonado con una cinta amarilla, los alrededores del local eran custodiados por la Policía Ministerial, la familia de la occisa permanecía dentro del perímetro, estaban angustiados, querían ver a Adriana, pero el equipo de Servicios Periciales estaba trabajando.
Al frente de la investigación se encuentra el agente del Ministerio Público, Julio Alejandro Silva Jiménez, quien coordinó la toma de muestras y el levantamiento del cuerpo, auxiliado por los agentes del Grupo de Homicidios que levantaban testimoniales en los alrededores del lugar.
A raíz de los arraigos de los integrantes de la familia Nájera Gandarilla, también se logró conocer mediante el Ministerio Público, que el viudo, Ubaldo Nájera Gandarilla, no interpuso la denuncia penal correspondiente, por la muerte de su esposa.
CRONOLOGÍA
Las nuevas autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado, no han pronunciado su postura en torno al crimen de la oftalmóloga asesinada en su consultorio hace un año.
26/sep/03.- Degollada en su consultorio, fue encontrada Adriana Ruelas Salcedo de 42 años, oftalmóloga y cantante.
29/oct/03.- Familiares de la occisa solicitan el cambio del agente investigador. Se conoce que el viudo, Ubaldo Nájera Gandarilla, nunca interpuso denuncia por el homicidio de su esposa.
14/nov/03.- Artemio Nájera Gandarilla y Jacinto García Cháirez, cuñado y concuño de Adriana Ruelas, son arraigados por su presunta responsabilidad en el crimen.
8/dic/03.- El agente del Ministerio Público termina de integrar la averiguación previa 2114/2003 y queda a disposición del Juzgado Penal de Primera Instancia con el número de proceso 209/03.
12dic/03.- Luis Enrique Montoya García, titular del Juzgado Primero, niega la orden de aprehensión contra los arraigados. Artemio y Jacinto quedan libres.
11/mar/04.- Tres meses después, el titular de la segunda Sala Unitaria Mixta, Héctor Pérez Enríquez, notifica sobre la no acreditación de la probable responsabilidad de los implicados en el crimen de Adriana Ruelas y ratifica la negativa de la orden de aprehensión.
12/mar/04.- El subprocurador, Joaquín Saucedo Flores, se manifestó contra la determinación de la autoridad jurisdiccional y dijo que se trabajará en lo necesario para sostener el dicho del Ministerio Público.
25/jun/04.- El Consejo de la Judicatura del Estado de Durango determina que el titular del Juzgado Primero se excuse del caso y ahora el proceso penal se llevará en el Juzgado Segundo Penal.
2/ags/04.- El Ministerio Público y la defensa del caso reciben la negativa del Juzgado Segundo en la aportación de pruebas de cargo en torno al crimen. La familia de la víctima sospecha de tráfico de influencias.
13/ags/04.- El titular del Juzgado Segundo del Ramo Penal, Carlos Reséndiz Estrada, sugiere que el Ministerio Público y la defensa investiguen y aporten nuevos elementos, con el fin de obtener diferentes resultados.
17/sep/04.- Carlos Reséndiz Estrada fue nombrado magistrado y ya forma parte de la Sala Colegiada Penal del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Durango. El caso de Adriana Ruelas sigue en el mismo Juzgado Segundo.
FUENTE: Archivo de El Siglo de Torreón
