EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Más de un año ha pasado sin que hasta el momento las autoridades hayan ubicado a los responsables de la brutal golpiza que recibió Irma Montes Arroyo, quien fue encontrada por uno de sus hermanos en el interior de su domicilio, dos días después de la salvaje agresión. La mujer murió en el Hospital Militar de la Ciudad de México, luego de una larga agonía, sin que antes pudiera señalar a los culpables de las graves lesiones que le costaron la vida.
Gerardo Villavicencio Valdés, coordinador de Homicidios ?B?, manifestó que hasta el momento no se cuenta con una pista concreta a fin de poder continuar con las indagatorias que lleven a localizar al o los presuntos responsables de la muerte de esta mujer.
Hasta la fecha, todo indica que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), tiene en sus manos otro crimen difícil de resolver, toda vez que se carece de los indicios suficientes para establecer tanto la identidad como el posible móvil de este sangriento y brutal asesinato.
La Agencia del Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Salud Personal, mesa uno, Coordinación ?B?, inició una averiguación previa primero por lesiones gravísimas que ponen en riesgo de muerte y luego por homicidio, luego que se reportó el deceso de Irma Montes Arroyo el 20 de julio de 2003, 16 días después de que se le encontrara en medio de un charco de sangre en el interior de su vivienda.
En relación con este homicidio, el Ministerio Público ha declarado a decenas de personas que conocieron a la occisa, tanto familiares como amigos, pero hasta ahora no ha surgido la pista necesaria para darle continuidad y así poder dar con los culpables de su muerte.
Sobre el posible móvil del ataque ya fue descartado el robo, pues no se observó que faltaran objetos de valor, además que la persona que llevó a cabo la agresión era conocida de la víctima, pues tampoco había huellas de que las cerraduras de puertas y ventanas fueron forzadas.
La historia
Los hechos se registraron presumiblemente el dos de julio de 2003, en el domicilio de Irma Montes Arroyo, sito en avenida Allende No. 2599 oriente, donde dos días después, la mujer de 54 años de edad, fue encontrada en el interior de su recámara en medio de un charco de sangre ya coagulada.
Quien hizo el hallazgo fue su hermano Alberto de los mismos apellidos, aproximadamente a las 20 horas del cuatro de julio del año pasado, luego que la dejó de ver por más de 48 horas.
Tirada en el piso, fue encontrada Irma Montes Arroyo. Presentaba huellas de haber recibido salvaje golpiza que le causó graves lesiones, entre ellas fractura de cráneo.
Alberto solicitó la presencia de la Cruz Roja que trasladó a la lesionada al Hospital Militar de esta ciudad, donde los médicos que la atendieron, reportaron su estado de salud como crítico.
Desde un principio, se estimó que la mujer llevaba poco más de 48 horas de haber sido atacada con un objeto contundente que pudo haber sido un garrote, bat o bien un tubo galvanizado que no fue encontrado en el domicilio.
Horas después recuperó la conciencia, pero sin poder manifestar a las autoridades ningún datos sobre quién o quiénes fueron las personas que la agredieron, pues no tenía coherencia en su hablar y mucho menos en su memoria.
Posteriormente Irma sufrió una recaída y debido a ello sus familiares decidieron trasladarla a la capital del país, donde el 20 de julio de 2003 dejó de existir sin poder recuperarse de la tremenda agresión sufrida.
El delegado de la Procuraduría General de Justicia del Estado, Gerardo Antonio Pérez Pérez, asegura que las indagaciones continúan mas reconoció que no se cuentan con pistas concretas que puedan llevar con él o los presuntos homicidas de la infortunada quincuagenaria.
