EFE
ESTOCOLMO, SUECIA.- A los treinta años de la victoria en el Festival de Eurovisión que supuso su lanzamiento, el cuarteto sueco ABBA sigue cosechando éxitos y sus ex miembros han construido verdaderos emporios con el producto de sus derechos de autor.
Mientras sus admiradores recuerdan el triunfo de ABBA en el concurso, el seis de abril de 1974, sus dos integrantes masculinos y compositores, Benny Andersson y Bjoern Ulvaeus, "dirigen grandes consorcios empresariales que son considerados máquinas de dar ganancias", publica el vespertino sueco Aftonbladet.
El espectáculo musical Mamma Mía, en cartel desde hace cinco años y representado en once países, es un rotundo éxito de taquilla, con unos ingresos totales en concepto de entradas de 734 millones de dólares (unos 610 millones de euros).
Con respecto a esa obra basada en éxitos de ABBA, el rotativo afirma que Andersson y Ulvaeus "dirigen conjuntamente un imperio de miles de millones que abarca una veintena de diferentes empresas en Suecia e Inglaterra".
Andersson es propietario del consorcio Baoab Holding, "calificado como la tercera empresa más rentable de Suecia", y según el rotativo, "en el 2002 aumentó sus beneficios un 300 por ciento y actualmente dispone de 180 millones de coronas (equivalentes a veinticuatro millones de dólares o veinte de euros) en su cuenta bancaria".
Treinta años después de triunfar en el Festival de la Canción de Eurovisión con Waterloo, ABBA sigue siendo el mayor éxito musical de Suecia.
De acuerdo con cálculos de Aftonbladet, Andersson percibe 25,32 dólares (veintiún euros) por minuto en concepto de derechos de autor por las canciones de su antiguo grupo.
Mientras, Ulvaeus, pese a que vendió sus derechos de autor, percibe elevados ingresos gracias a la obra "Mamma mia".
"Mamma Mia me va a hacer más rico que lo que ABBA me hizo" declaró.
El cuarteto, cuya música se hizo tan famosa como la imagen de sus integrantes, estaba formado por Ulvaeus a la guitarra, Andersson a los teclados y Agnetha Faltskog y Frida Lyngstad como cantantes.
Además de su fructífera relación musical, los miembros de ABBA mantenían lazos conyugales, pues tanto la pareja formada por el barbudo Andersson y la noruega Lyngstad como la de los rubios Ulvaeus y Faltskog -quien hoy cumple 54 años- estuvieron casados durante sus años de gloria, que acabaron con la disolución del grupo en 1982.
Los ocho discos grabados en estudio por ABBA -que también editaron un recopilatorio en español, "Gracias por la música"- han superado en ventas a los de estrellas de la magnitud de Frank Sinatra y The Beatles, y se han convertido en el producto comercial sueco de mayor éxito mundial, junto a los automóviles Volvo y los muebles de Ikea. EFE
Lo básico
La historia de Abba va íntimamente ligada a las carreras previas al grupo de cada uno de sus componentes.
-Cada uno de su integrantes era conocido en Escandinavia y Centroeuropa por su carrera musical más o menos exitosa. Benny y Bjorn se conocieron un día cuando coincidieron de gira con sus respectivas bandas, lo que llevó a una amistad en un principio, a una colaboración posterior y culmina en la formación de un duo musical.
-Por lo que se refiere a las chicas, Agnetha (la rubia), había lanzado su primer trabajo en 1968 con gran éxito, no sólo en Escandinavia, sino en Alemania, Holanda y resto de países de Centroeuropa. En 1969 conoce a Bjorn durante una actuación de tv, que acabaría en 1971 en matrimonio.
-Frida, la pelirroja del grupo, comenzó en los sesenta como cantante de jazz con escaso éxito. Cuando conoce a Benny y comienza su relación con este, ya tenía varios trabajos en el mercado, aunque no contaba con el éxito de su compañera.
FUENTE: Agencias