EFE
LONDRES, INGLATERRA.- El ministro saudí de Asuntos Islámicos, Saleh Bin Abdulaziz, afirmó en Londres que la actividad terrorista es “controlable” en su país, en cuya capital fue asesinado ayer un ciudadano estadounidense y descubierto un coche bomba junto a una univesidad.
Abdulaziz, que visitó un centro islámico en la capital británica, admitió en una rueda de prensa que el terrorismo “es un problema, aunque no ha alcanzado un nivel de crisis en Arabia Saudita”, pese a los recientes ataques contra objetivos occidentales.
El ministro saudí hizo estos comentarios un poco antes de que un estadounidense, del que se ignora su ocupación o su edad, fue asesinado por dos desconocidos junto al garaje de su domicilio en el barrio de Maathar, informó por su parte la cadena árabe por satélite Al Arabiya.
El hombre se disponía a entrar en su coche cuando fue disparado por los atacantes, que de inmediato se dieron a la fuga y que ahora son buscados por la policía de Riyad.
El pasado martes, otro estadounidense, instructor de la Guardia Nacional saudí, fue asesinado a la puerta de su casa en plena luz del día, también en Riyad.
Este hombre vivía solo en Riyad después de que su mujer e hijos hubieran abandonado el país ante la ola creciente de ataques a occidentales, que ha hecho que la embajada norteamericana recomiende a sus ciudadanos salir del país si su trabajo no es esencial.
Además, la Policía saudí encontró ayer un coche bomba antes de que hiciera explosión junto a uno de los muros de una universidad en el noroeste de esta capital, informó la cadena de televisión Al Arabiya.
El vehículo fue encontrado en la Universidad Islámica del Imam Mohamed bin Saud, añadió la cadena, una de las mejores informadas sobre los asuntos de seguridad en este país, aunque no ha habido confirmación oficial al respecto.
Arabia Saudí ha vivido en el último año una campaña de atentados contra los ciudadanos occidentales que viven en su suelo, bien a través de asesinatos individuales o de coches bomba que habitualmente son colocados en los complejos residenciales donde habitan los extranjeros.
Habitualmente, los atentados con coches bomba se hacen con varios vehículos que explotan de forma casi simultánea o en cadena, por lo que no se descarta que, además del coche encontrado, haya otros preparados para explotar.