Captura la Ministerial a tres sujetos al parecer relacionados con los hechos ocurridos en la colonia Morelos Norte
Un comandante de la Policía Ministerial fue acribillado a balazos en el Cerro de la Vaca, por el rumbo de la colonia Morelos Norte, durante un enfrentamiento con unos hermanos de apellido Díaz. Su compañero fue herido de varios disparos y permanece grave en la clínica del ISSSTE.
Candelario Bueno Valenzuela es el nombre extinto oficial, quien se desempeñaba como jefe del Grupo de Órdenes de Aprehensión y Édgar Iván Salas Salas es el agente que lo acompañaba al momento del enfrentamiento.
En el transcurso de la tarde, fueron aprehendidos tres presuntos responsables, luego de catear varios domicilios en colonias aledañas al sitio del homicidio.
HECHOS
Cerca de las 11:40 horas, agentes de la Policía Ministerial y de Seguridad Pública fueron alertados por vecinos del asentamiento sobre una balacera que se escuchó en el cerro. Hasta el lugar, más de una decena de vehículos de ambas corporaciones se movilizaron para atender el llamado en donde les indicaron que había víctimas.
Casi en despoblado, entre rocas y viviendas en construcción, en la intersección que forman las calles Félix Rodríguez y José Banderas del mencionado asentamiento, estaba el cuerpo del agente cubierto con una sábana blanca, sujetando aún en la diestra su arma de cargo, una pistola calibre .9 mm, adelante de un vehículo Nissan de color rojo, sin placas de circulación. A pocos centímetros de ahí un arma, al parecer calibre .45.
Momentos antes, su compañero fue trasladado por paramédicos de la Cruz Roja a la sala de Urgencias de la clínica Santiago Ramón y Cajal, debido a las múltiples heridas.
El vehículo presentó nueve impactos al parecer de AK-47 (?cuerno de chivo?): uno en el parabrisas, otro en el techo, siete en el costado derecho, estos últimos de soslayo.
Elementos policiacos acordonaron el área, al tiempo que llegaba el agente del Ministerio Público de turno acompañado de personal de Servicios Periciales y la unidad del Servicio Médico Forense para iniciar las pesquisas en el terreno.
Según lo manifestaron sus compañeros, Candelario, con 18 años de servicio en la institución, estaba en cumplimiento de su deber al realizar un recorrido de vigilancia para ejecutar una orden de aprehensión, al parecer entre algunos sujetos de apellidos Díaz.
Decenas de curiosos se dieron cita para observar lo ocurrido, en tanto un helicóptero del Gobierno del Estado sobrevolaba el entorno para dar con una camioneta Dodge, tipo Ram, de color azul, en la que presuntamente huyeron los homicidas del comandante.
Más de una decena de ojivas y casquillos percutidos fueron levantados del lugar de los hechos. Entre los comentarios de los peritos se supo que eran de calibre 7.62 , de las utilizadas por el arma conocida como AK-47 o ?cuerno de chivo?, calibre .45 y .9 milímetros.
Sergio Arturo Rocha Espinoza, agente del Ministerio Público de la mesa No. 20, señaló que el cuerpo de Bueno Valenzuela presentó a primera vista tres impactos de proyectil de arma de fuego, uno en la frente con salida en la parte posterior (región occipital), otro en el tórax lado derecho y uno más en la cara interna del brazo.
Por su parte, Édgar Iván sufrió en total cinco impactos: uno en la clavícula lado izquierdo, uno en el fémur derecho y otro en el izquierdo, uno más en la rodilla y otro entre la cadera y el muslo, todos con probable fractura de las estructuras óseas.
La madre y la esposa del hoy occiso acudieron al lugar para identificar el cuerpo de su ser querido y en medio de gritos y llanto trataban de dar crédito a lo sucedido, ya que meses atrás dos hermanos del extinto agente, ambos elementos ministeriales, fallecieron en similares circunstancias.
ESTABAN DISCUTIENDO: VECINOS
Conforme a los reportes de los propios vecinos del lugar, quienes por temor a verse involucrados se negaron dar sus nombres, indicaron que alcanzaron a ver al hoy occiso y a su compañero discutiendo con dos personas más de las que no alcanzaron a observar sus rostros.
Desde el interior de los domicilios sólo alcanzaron a escuchar los disparos, primero espaciados, posteriormente varias ráfagas, sin saber a qué tipo de armas correspondían las detonaciones. Posteriormente sólo alcanzaron a escuchar el sonido de un vehículo que arrancaba. Entre el silencio y la confusión siguieron los gritos de auxilio de una persona.
?Sentimos temor y para no salir heridas preferimos no salir hasta que todo pasó, señalan dos jovencitas de 15 y 17 años entrevistadas en el lugar de los hechos y agregaron: ?cuando escuchamos las sirenas, entonces sentimos que había seguridad y salimos?.
Mujeres con niños en brazos, señoras de avanzada edad, todas vecinas del lugar, se negaron a dar más detalles, ya que señalaron sentir miedo por posibles represalias.
Los agentes de la Ministerial no descartan que los presuntos responsables sean conocidos de los vecinos que estaban de curiosos y algunos de los cuales aportaron datos que sirvieron para iniciar las investigaciones. Se indicó que se seguirá interrogando a los posibles testigos, para recopilar más datos que puedan llevar a la identificación y captura de los agresores.
CAPTURAN A TRES PRESUNTOS PARTICIPANTES
A pocos metros del lugar de los hechos, los agentes ministeriales se dieron a la tarea de catear un domicilio con fachada de color rosa, distinguida de las demás por un gran portón de lámina color gris, además de una camioneta marca Dodge, de color gris acero, con permiso provisional para circular sin placas.
En el medallón y en la parte superior del parabrisas podía leerse el apellido Díaz, al parecer propiedad de los presuntos homicidas. Fotografías y documentos importantes fueron revisados por los agentes para tratar de obtener pistas sobre los delincuentes.
A los pocos minutos fue detenido cerca del lugar Feliciano Peña González, de 35 años, de oficio taxista, quien permanecía sentado en la caja de un vehículo de la corporación, con las manos esposadas por la espalda, en tanto un elemento lo interrogaba respecto de sus generales y nexos con los presuntos culpables.
Guadalupe Montes, esposa del detenido, llegó hasta el sitio protestando por la captura de su marido, ya que dijo que sólo fue al lugar para ver qué pasaba.
?No sé por qué lo detienen, él ni los conoce, sólo vino para enterarse de lo sucedido y ahora resulta que se lo llevan?, dijo.
Tiempo después, cerca de las 13:45, un grupo de agentes capturaba en un domicilio de la colonia López Portillo a Joel y Manuel Díaz Urbina, al parecer involucrados en la balacera, pero a decir de sus familiares, tampoco tienen nada qué ver debido a que a esa hora estaban con ellos.
CONTINÚAN LA BÚSQUEDA
El procurador de Justicia, José Oliverio Reza Cuéllar, acudió al lugar de los hechos y aseguró que la muerte del agente ministerial, así como las lesiones del otro elemento, no quedarían impunes ya que personalmente el director de la Policía Ministerial, Eulalio Aldama Enríquez, encabezará las investigaciones.
Ante los medios de comunicación ahí reunidos, el funcionario estatal no quiso abundar en detalles al respecto, ya que explicó la existencia de información importante respecto de las identidades y el paradero de los homicidas, que al darse a conocer podrían echar abajo cualquier posible ubicación de estas personas.
En relación con el mismo caso fue posible observar aún por la tarde y parte de la noche varias unidades de la Policía Ministerial y Seguridad Pública realizando recorridos y cateos a otros domicilios de colonias como la Lázaro Cárdenas, Morga, Miguel de la Madrid y una parte de la Mayagoitia, en busca de los homicidas.