Los candidatos dilucidan hoy las elecciones más reñidas de los últimos años en EU en las que participan más de 150 millones de votantes.
Crawford (EU), (EFE).- El presidente de EU y candidato a la reelección, George W. Bush, acompañado por su esposa Laura y sus hijas Jenna y Barbara, concurrió hoy muy temprano a votar en la estación de bomberos de Crawford, cerca de su rancho en Texas.
Después de depositar su voto, Bush dijo a los periodistas que tenia un "sentimiento maravilloso" y subrayó que "el mundo entero observa como trabaja nuestra democracia".
"Estoy muy confiado, confío en el juicio del pueblo estadounidense", expresó el presidente, quien agregó que "la ciudadanía sabe cual es mi posición clara en los principales asuntos y ahora ha llegado el momento de escuchar lo que el pueblo opina".
Bush destacó que "sería mucho mejor" para la democracia que pudiera conocerse el resultado esta misma noche.
Se espera que en los comicios presidenciales participen hasta 125 millones de personas, que son los votantes que, o ya se han registrado, o se prevé que pueden estar registrados hasta el final de la jornada de hoy.
De momento, la participación está siendo elevada y se registran largas colas en muchos colegios del país.
Bush esperará el resultado en la Casa Blanca, junto a su familia.
Vota Kerry
John Kerry se tomó con más tranquilidad el ir a votar y no lo hizo hasta pasadas las 18.00 GMT en el centro de Boston, una ciudad que espera celebrar hoy, como lo hizo hace 44 años con John F. Kennedy, el triunfo de otro "JFK" bostoniano, católico y demócrata.
La seguridad nacional y la situación no muy boyante de la economía de EEUU son el telón de fondo de esta elección, que se celebra tras cuatro años económicamente difíciles durante los que no se ha cumplido con las expectativas de creación de empleo.
Sin embargo, según los expertos, no es sólo la gravedad de los desafíos a los que se enfrenta el país lo que motiva a los estadounidenses a acudir a votar en masa, sino la propia figura del presidente y sus respuestas a estos problemas.
Empate técnico
Los últimos sondeos pre-electorales muestran un empate técnico entre ambos candidatos, mientras analistas, jefes de campaña y electores ponen sus ojos en un puñado de estados clave, entre los que se encuentran Florida, Pensilvania, Ohio, Minnesota y Wisconsin.
FLORIDA DE NUEVO EN OJO DE LA TORMENTA
Todas las miradas estarán puestas nuevamente en Florida, junto con Ohio, estados que Bush ganó por estrecho margen en el 2000 y que ahora podrían definir el resultado.
Kerry debe ganar al menos uno de esos dos estados para tener posibilidades concretas de alzarse con la presidencia, al tiempo que una derrota en Florida complicaría a Bush a menos que triunfe en Pennsylvania o estados del Medio Oeste como Minnesota, Wisconsin y Iowa, todos ganados por Gore en el 2000.
Un sondeo de Reuters/Zogby en diez estados clave reveló que Bush aventaja a Kerry en Ohio por seis puntos porcentuales y que en Florida los candidatos se encuentran empatados con un 48 por ciento cada uno.
Kerry aventajaba a Bush en seis estados, todos distritos en los que Gore ganó en el 2000. Para alcanzar la Casa Blanca, el candidato demócrata deberá vencer en algunos de los estados donde Bush triunfó hace cuatro años.