Convivencia|La intención es tener todo listo para el Dos de Noviembre
EL SIGLO DE TORREÓN
Madres e hijos barrían las tumbas de sus familiares
TORREÓN, COAH.- Familias enteras acudieron a las criptas de sus finados y pasaron ahí toda la mañana, pero lejos de significar la visita a los difuntos, aseguran fue día de limpieza y embellecimiento de las tumbas, para que el Día de Muertos puedan acudir únicamente a recordarles y acompañarles, sin más.
Mientras las hijas barrían, los niños retiraban la hierba, el hijo mayor acarreaba el agua, el padre lavaba la tumba y la mamá compraba refrescos y lonches para todos.
El panteón Torreón, ubicado en la colonia Aquiles Serdán, es de los cementerios más concurridos, según explican los panteoneros, pues alberga unas 16 mil tumbas. En la entrada, una patrulla de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) impedía el acceso a los vehículos al interior del camposanto y observaba a los vendedores.
Comerciantes de flores de diversos tipos, ramos, cañas de azúcar y gran cantidad de alimentos, hicieron su aparición en las afueras del cementerio. En las calles, los niños con franelas rojas señalaban a los automovilistas dónde colocar sus vehículos, al tiempo que ofrecían sus servicios para lavarlo o sólo ?echarle un ojo?.
Poco antes de las 12 ya se había terminado el agua de uno de los pozos del cementerio, pero abundaban los muchachos desde los ocho años hasta pasados los 20, que transportaban el vital líquido a la cripta por diez pesos la cubeta o 15 si eran dos.
Los días antes al dos de noviembre significan una reactivación de la economía para las colonias aledañas a los panteones, pues aún los vecinos aprovechan para colocar una manta que proteja del Sol y vender gorditas, tacos o lo que mejor le quede a la señora del hogar.
Algunas personas explicaron que preferían acudir el fin de semana anterior al Día de Muertos para evitarse el congestionamiento vial, falta de estacionamiento y demás factores que origina la gran cantidad de visitantes el dos de noviembre.
Así, se adelantan unos días pero pueden disfrutar de una mayor privacidad con sus difuntos y fomentar la tradición en los niños más pequeños, de lavar la tumba, rezar, entonar algunos cantos religiosos y decorar con flores.
Llenan de basura el lugar
En el panteón Torreón, ubicado en la colonia Aquiles Serdán, los trabajos de embellecimiento por parte del personal comenzaron desde hace tres semanas, pero ayer se vieron frustrados, pues según señalaron los enterradores, para el dos de noviembre, Día de Muertos, cuando se registra mayor afluencia de gente, su labor está desecha.
Las personas que acuden días antes, dejan envolturas y restos de comida, flores y demás artículos que utilizaron para limpiar las criptas de sus familiares, además de la basura generada por los vendedores que se postran en las afueras del camposanto, pues aunque se pide que recojan su mercancía al retirarse, no todos cumplen con ello.