13 de abril de 2004.
Bagdad (SUN-AEE).- Estados Unidos acumulaba el martes fuerzas militares en las afueras de la ciudad sagrada shiita de Nayaf en preparación para una posible ofensiva contra el clérigo rebelde Muqtada al Sadr y su milicia.
Una ofensiva de ese nivel podría suscitar la ira de los iraquíes, que advirtieron a los soldados que no profanaran sus templos sagrados.
Entretanto, grupos armados opuestos a la ocupación de Iraq dejaron en libertad a algunos rehenes extranjeros -cinco ucranianos y tres rusos- pero presentaron nuevas exigencias para la liberación de otros. Los rebeldes exhibieron a cuatro italianos y exigieron a Roma la retirada de sus tropas de Iraq, mientras un periodista francés se convertía en el último en engrosar la lista de cautivos.
Tropas concentradas
El general de brigada estadounidense Mark Kimmitt, subdirector de operaciones militares estadounidenses en Iraq, dijo que se estaba acumulando una fuerza en las afueras de Najaf, al sur de Iraq, donde se cree que al Sadr se encuentra refugiado junto al principal templo de la ciudad.
Una revuelta protagonizada por las milicias de al Sadr este mes se propagó por varias áreas chiítas de Bagdad y el sur de Iraq, lo que abrió un nuevo frente de batalla para las fuerzas estadounidenses que ya luchaban con la minoría de musulmanes sunitas en ciudades como Falluyah, en el oeste, donde ha sido capturada la mayoría de rehenes.
Las fuerzas estadounidenses dicen que capturarán al clérigo shiita vivo o muerto, mientras que al Sadr ha expresado su disposición a morir tratando de expulsar a los norteamericanos de Irak.
"Actualmente vemos una amenaza significativa en los alrededores de Nayaf por parte de Muqtada al Sard y su milicia", dijo Kimmitt en una conferencia de prensa en Bagdad. "Llevaremos fuerzas allí, cuando sea necesario, para perseguirle a él y su milicia y poner fin a la violencia, así de simple", afirmó.
El portavoz de al Sadr en Najaf dijo que si Estados Unidos entraba en la ciudad, ello desataría una ola de violencia en todo Irak.
"Si tocan a Muqtada al Sadr, habrá una crisis", dijo Qays al Khazali en una conferencia de prensa. "Por el momento se enfrentan a una insurrección, pero si causan daño a al Sadr habrá una revolución de masas en todo Irak. Será una bomba de relojería".
Al Sadr dijo en una entrevista televisiva que estaba dispuesto a sacrificarse e instó a sus seguidores a seguir luchando contra la ocupación incluso después de su muerte.Acumula
