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VILLAHERMOSA, Tab.- El secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Javier Usabiaga sostuvo que a los gobiernos estatales les corresponde también solucionar los problemas del campo mexicano, y no sólo al federal.
Convocó a los gobernadores del país a asumir sus propias políticas públicas dirigidas hacia ese sector.
Afirmó que los modelos de producción del campo están agotados, y el gobierno del presidente Vicente Fox viene impulsando una nueva política hacia el campo, basada en los conceptos de competitividad, productividad y corresponsabilidad.
En entrevista, afirmó que la planeación y las políticas de atención a la ciudadanía deben ser eminentemente estatales, mientras que la federación asume su responsabilidad para ejercer los actos de autoridad que la ley le confiere, “ser el facilitador, promotor, el que encuentre los mercados y ponga las líneas gruesas de ideas para el desarrollo y para la integración nacional”.
Reiteró que el papel del gobierno federal, en particular en relación al campo, es el de conectar y abrir los mercados, pero serían entonces los gobiernos estatales los responsables de incentivar las condiciones de factibilidad para las actividades del sector.
El titular de la Sagarpa participó hoy aquí en la 31 asamblea nacional de la Asociación Mexicana de Secretarios de Desarrollo Agropecuario del los Estados, cuya mayoría de sus integrantes también reclamaron mayores apoyos para sus entidades, donde insistió que es una responsabilidad compartida federación y estados, el atender al sector agropecuario.
Los gobiernos locales, comentó, deben de asumir esa responsabilidad con sus ciudadanos para el desarrollo del espacio territorial que le ha sido conferido, en el que habita una sociedad rural y que debe ser una atención prioritaria del estado.
Dijo que en estos momentos la Sagarpa trabaja en su refundación y rediseño para convertirla en el motor de desarrollo a nivel nacional, pero pidió que los estados tomen y acompañen en este proyecto con acciones puntuales y pertinentes a través de un proceso de planeación, “ya que nadie conoce más al estado, nadie ama más a su estado que aquellos que en el habitan y que eligen un gobierno democráticamente”.
Se refirió a las “nefastas” políticas de crédito del campo al país, incapaces de generar sujetos de crédito, de desarrollar cultura de pago, de ejercer y de otorgar el crédito con responsabilidad.
“Muchos de los grandes fracasos de las carteras vencidas en el sector agropecuario -señaló el funcionario al referirse a este tema- es por falta de responsabilidad, de la ausencia de responsabilidad en otorgamiento de los créditos en donde se daban sin un proyecto productivo, sin un análisis puntual de la rentabilidad del proyecto, sino más bien pensando en las garantías y nunca pensando en el objetivo motor de crédito que es el desarrollo de una actividad productiva, la generación de empleos y riquezas”.
En declaraciones a la prensa, manifestó que hoy es necesario que el sector agropecuario se adapte a una nueva oferta de productos basados en la inocuidad, la sanidad, la aceptación del mercado y en la demanda que el mercado rige, proceso que tiene que acompañarse creando infraestructura que será la que detone y facilite el acceso a esos mercados.
Afirmó que por eso se necesita un cambio de modelo estructural en el que se abandone el paternalismo y se cambie por una corresponsabilidad, se busque la diversificación de cultivo en donde exista mayor rentabilidad.
