EL SIGLO DE TORREÓN
Ciudad Lerdo, Dgo.- Las violaciones fueron en serie. Un grupo de menores, primos y vecinos, de la colonia Francisco Villa Sur, fueron víctimas y victimarios de abuso sexual. Uno de los afectados tiene diez años y reveló los hechos a su madre. La policía detuvo a un presunto de 12 o 14 años, éste a su vez dijo que su victimario era un joven mayor. El acusado quedó libre mediante un inverosímil “convenio”.
Las madres de los niños son las principales responsables, fue el enunciado en el que coincidieron Blanca Olguín Castañeda, titular de la oficina de la Mujer en Lerdo; Cony Moreno Bocanegra, agente del Ministerio Público. Por su parte, Sarah de los Santos Llamas, responsable de la oficina local de Derechos Humanos, señaló que la problemática entre los menores de la citada colonia debe atenderse a fondo.
La situación es compleja. Temeroso por el abuso del que fue objeto, el menor de diez años no fue sincero al informar la noche del martes diez de febrero a su madre de la violación. Dijo que había sido un señor que iba en un carro, al día siguiente interpusieron denuncia. La noche del jueves, el niño revela un nombre: fue “Pepe”.
María Ortega Andrade, madre del menor de diez años, interceptó una patrulla de la Policía Ministerial, explicó el dicho de su hijo y se abocaron a buscar al señalado. “Pepe” trabaja con un tío por las noches, lavando trailers en la salida de Lerdo, en un corredor de “antros” y restaurantes de todo tipo.
“Pepe” tenía todas las de ganar. Su madre es Norma Celestina Ortega Andrade, brazo derecho de Blanca Olguín y tía del menor afectado. De inmediato se movilizaron y cuestionaron la procedencia de la detención al comandante de la Policía Ministerial, Gilberto Estrada Quiñones, amenazando con la intervención de Derechos Humanos.
Libertad anunciada
A temprana hora, Sarah de los Santos se encontraba en la antesala de los módulos de detención, atendiendo a “Pepe”. La funcionara estatal aseguró que su visita fue incidental, que vio al niño y lo atendió. En las celdas también estaba Edgar, otro menor de 12 años, acusado de robo, pero fue ignorado.
A las 11:00 horas, en la agencia del Ministerio Público, la titular, Cony Moreno, escuchaba el diálogo de las dos partes. A la salida de la oficina, en los pasillos de la Subprocuraduría, María estaba molesta, decía que por su ignorancia, Norma y “las demás” iban hacer lo que quisieran.
María dijo que en la oficina del Ministerio Público iba a firmar un convenio. Según la mujer, el convenio era para que todos los niños involucrados recibieran terapia, “Pepe” también, pero este último no sería enviado al Centro de Orientación y Observación de Menores Infractores (COOMI) en Durango, sino que iba a ser albergado en el internado Francisco Zarco. Al final, a las 13:15 horas del vienes 13 de febrero, “Pepe” quedó libre.
