MÉXICO, DF.- El Andretti Green tradujo su supremacía en la Indy Racing League con el título por conducto del brasileño Tony Kanaan, sin embargo el mexicano Adrián Fernández fue un gran animador, pese a que se unió tarde a la categoría.
Con tres victorias en la temporada, Tony Kanaan, que cerró con cuatro podios consecutivos, acumuló 618 puntos para hacer el 1-2 para su equipo junto con el inglés Dan Wheldon, quien se ubicó en la segunda plaza absoluta con 533 unidades.
El estadounidense Buddy Rice, del equipo de Bobby Rahal que también abandonó por completo la Champ Car, gobernó las tradicionales 500 Millas de Indianápolis en mayo pasado y fue tercero general con 485 puntos.
Gracias a su triunfo en el óvalo de Indianápolis, donde la lluvia fue un gran estorbo y de hecho la carrera concluyó en bandera amarilla, Buddy Rice fue el líder en ganancias con dos millones 698 mil dólares.
La llegada de Adrián
Tras más de una década de correr en la Serie Cart, Adrián Fernández decidió cambiar de aires y emigrar a la IRL, categoría que ofrecía a su equipo, creado en 2000 junto con su socio Tom Anderson, un futuro mucho más promisorio.
Con 41 años de edad, el piloto capitalino desató duras críticas por el cambio, principalmente porque se creía que sus mejores tiempos ya habían pasado y, además, daba la espalda a una categoría que lo necesitaba más que nunca.
No obstante, el capitalino sólo tardó media temporada en adaptarse y rápidamente comenzó a rendir frutos para el Fernández Racing, para finalmente ubicarse en el quinto escalón general con 445 puntos y tres victorias, todas ellas espectaculares.
Fernández Mier se perdió la ronda inaugural en Homestead, pues aún no dejaba la Cart, así que hizo su debut hasta la segunda fecha en Phoenix, donde no consiguió completar una sola vuelta por problemas en la transmisión.
Pero ya para la tercera fecha, en las célebres 500 Millas, el Fernández Racing dio visos de competitividad. De hecho, aunque tuvo que conformarse con un séptimo sitio, tras largar en sexto, fue uno de los más rápidos durante todo el mes de mayo en el Indianápolis Motor Speedway.
Con el equipo en ascenso, sólo era cuestión de tiempo para ver la bandera mexicana en el podio. Michigan parecía ser el momento adecuado, pero un error de Adrián en una entrada a pits cuando rodaba entre los punteros lo alejó de toda posibilidad.
Pero llegaría el domingo 15 de agosto en Kentucky, donde arrancó en la quinta posición y ahora sí, sin error de por medio, se llevaría su primera bandera a cuadros de la campaña, luego de liderar las últimas 51 vueltas tras un rebase múltiple por la parte superior del óvalo.
Ahí no terminaron los logros de Adrián, quien todavía consiguió triunfos en Chicago, donde batió por centímetros al estadounidense Bryan Herta, y cerró su racha ganadora imponiéndose en el superóvalo de Fontana.
Fernández concluyó con 445 unidades y más de un millón de dólares en ganancias, en una temporada brillante que debe ser un anticipo de un 2005 lleno de buenos augurios, en el que la escudería tricolor se presentará con tres autos.
El dominio de Kanaan
El desempeño de Tony Kanaan fue un ejemplo de consistencia, pues completó todas y cada una de las tres mil 305 vueltas en las 16 carreras que integran el calendario 2004, es decir, su auto nunca falló y sus manos, tampoco.
Además, sólo en una ocasión quedó excluido de las cinco primeras posiciones y lideró un total de 889 giros. Su más grande regreso fue en Fontana, donde largó en el último casillero, el 21, y se metió hasta el segundo puesto.
Tony Kanaan consumó el campeonato hasta la última ronda en el Texas Motor Speedway de Fort Worth, donde repitió con un segundo puesto para dejar con el subcampeonato a Dan Wheldon, que a su vez consiguió tres triunfos en el año.
El Fernández Racing se anotó otro éxito en 2004, al conseguir el título de Novato del Año por conducto del japonés Kasuke Matsuura, quien sumó 280 unidades contra 245 del estadunidense Ed Carpenter, del equipo Chever Racing.