AGENCIAS
MÉXICO, DF.- A cuatro años del arribo de la administración foxista, el sector privado reconoce logros, pero también manifiesta su preocupación por el retroceso en materia de empleo, crecimiento económico, Inversión Extranjera Directa (IED), dependencia de los ingresos públicos de los petroleros y rezagos en infraestructura.
En un balance de los últimos cuatro años de Gobierno en México, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) manifiesta que la economía ha enfrentado diversos retos, tanto externos como internos, lo que limita el logro de los objetivos.
La desaceleración de la economía mundial, explica, produjo un notable descenso de la actividad exportadora y con ello una fuerte caída en la producción industrial y el empleo formal.
Sin embargo, la economía informal siguió en aumento y en parte mitigó la pérdida de empleos; de hecho la masa salarial y el poder adquisitivo crecieron durante los primeros cuatro años de este Gobierno, lo que ayudó a mantener el consumo y las ventas, aunque la inversión se mantuvo estancada, destaca el organismo empresarial.
La inversión, dice, se ha visto ensombrecida por problemas de inseguridad, escasos avances en materia de menor regulación económica en el ámbito federal, con retrocesos importantes en municipios y los estados.
El documento nombrado “La economía de México 2001-2004”, destaca que dentro de las promesas de campaña del hoy presidente Vicente Fox estaban elevar el crecimiento económico y la generación de empleos, pero adversidades externas e internas limitaron estos objetivos.
El estudio hace una reflexión en diversos temas económicos, como empleo, inflación, tipo de cambio, infraestructura, finanzas públicas, salarios y pobreza.
En materia de empleo, al que considera como uno de los grandes problemas no resueltos de este sexenio, recuerda que la tasa de desocupación abierta en 2000 era de 1.90 y actualmente es de 3.48 por ciento.
Además, señala, el número de trabajadores afiliados al IMSS, el indicador del empleo formal era de 12.7 millones en 2001 y en mayo de 2004 alcanzó 12.5 millones, lo que refleja una pérdida de fuentes de trabajo.
El CCE reconoce que la economía informal es una fuente de ingresos para la población, pero advierte, su crecimiento es una limitante para la productividad del país. La economía informal genera 12.5 por ciento del PIB y absorbe el 26.9 por ciento de la población ocupada.
José Luis Barraza, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), aseguró que es necesario un mayor compromiso de las autoridades para solucionar estos rezagos.
El sector privado también cuestiona que no se logre reducir la dependencia de los ingresos públicos de los ingresos petroleros; lamenta que no haya sido favorable elevar la participación de la inversión pública en el gasto total lo que provoca acumular rezagos importantes en la infraestructura productiva.
En el rubro de la IED el CCE lamenta la existencia de una tendencia decreciente.
“En 2003 se tuvo una recepción de IED de sólo 10.7 mil millones de dólares, el menor nivel que ha recibido el país en los últimos diez años”.