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MÉXICO, DF.- Los altos precios del petróleo podrían frenar el crecimiento de la economía mexicana, al convertirse en un obstáculo para elevar la productividad de las empresas y limitar la creación de empleos, reconoció Felipe Calderón, titular de la Secretaría de Energía (Sener).
Explicó que a pesar de que el aumento de la cotización internacional del hidrocarburo se traduciría en mayores ingresos para el Gobierno Federal e incluso para Petróleos Mexicanos (Pemex), el mayor riesgo de esta situación es perder el control de la inflación.
El problema, dijo es que los altos precios del petróleo encarecen a otros combustibles como gasolina, diesel, carbón y gas natural, que repercuten en los costos de producción de las empresas, del sector eléctrico que los utilizan para la generación de electricidad y del costo mismo de la energía eléctrica que demanda la industria, el comercio, los servicios, el agro y el sector residencial.
Incluso, desde hace dos años se utiliza una fórmula de ajuste automático mensual de las tarifas eléctricas que reconoce el aumento de los costos de los energéticos como el gas natural, lo que podría hacer todavía más caro el servicio para todos los usuarios.
Aceptó que todavía es prematuro saber si México elevará sus exportaciones en resonancia a la decisión que adopte la OPEP para tratar de estabilizar los precios.
Señaló que aunque será hasta finales de año cuando el país tenga una mayor capacidad de exportación en el corto plazo se podría ?sacrificar? producción nacional para destinarla a la exportación.
Al titular de la dependencia se le cuestionó sobre el impacto del aumento del precio del gas natural para la empresa mexicana.
Explicó que la mayor parte de la planta industrial del país pudo aprovechar el programa de coberturas del gobierno federal, que en esencia les permite aprovechar un precio de 4.50 dólares el millón de btu (unidad calorífica), mientras que en el mercado spot el precio del gas es de alrededor de seis dólares.
Este fue un programa de libre suscripción por parte de las empresas y ?el Gobierno mexicano no tiene previsto ningún esquema adicional para las empresas que decidieron no acogerse al programa de coberturas, tal y como se advirtió en su momento?, resaltó.
Las expectativas originales del Gobierno consideraron una baja en el precio del petróleo a partir del segundo semestre del año, aunque diversos factores políticos y de seguridad, aunque el cambio más relevante fue el crecimiento de economías como la de China, que contribuyeron al aumento de la demanda mundial, no sólo de petróleo sino de diversos bienes que han registrado incrementos de precios.
