EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- La representante del Gremio Único de Pepenadores, María Sofía Gámez Silva, considera que la situación actual del llamado relleno sanitario, “la politizaron tanto que la más afectada es nuestra gente”. Dice que la solución es la implementación de un proyecto productivo de reciclaje.
Se trata de un trabajo ingrato y poco rentable, pero la gente continúa ahí porque no tiene manera de conseguir trabajo en otro lugar. Muchos son personas mayores que por su edad ya no los aceptan en cualquier parte.
Gámez Silva indica que el problema es que se politizó “a más no poder”. Y como prueba menciona que no están llegando hasta el lugar los compradores. Éste es el conflicto que ahora enfrentan los pepenadores, “porque ahora tienen que cargar el material y llevarlo a vender a donde puedan”.
Dice que antes del lugar donde se encuentra el tiradero municipal –en San Isidro concretamente-, el camión de la basura es interceptado por gente que compra la mayor parte de la carga, “esto no se vale, porque es gente que de eso come”.
Desde que empezó lo del relleno sanitario, dice, fue entonces que inició la problemática porque no le pusieron geomembranas, no lo prepararon. La primera de dos celdas que se hicieron, fue un pozo de cuatro metros hacia abajo, “pero nadie dijo que no podía sostener tanto peso, porque inclusive ni siquiera podían entrar los camiones”.
Recuerda que todo la dificultad surgió a raíz de la Ley que prohíbe la quema, “en esto estamos de acuerdo, pero el conflicto es que no hemos podido conseguir quién nos compre todos los productos reciclables”.
Proyecto de reciclaje
María Sofía Gámez Silva dice que el material reciclado que los pepenadores juntan es muy poco. Además no tienen dónde almacenarlo, razón por la que solicitaban un espacio a la Presidencia Municipal para poner en marcha un proyecto productivo de reciclaje.
Para este fin, necesitaban una compactadora y un área para instalarla y para que se fuera acumulando el material. De esta manera podrían hacer el trato directo en Monterrey.
“Pero desafortunadamente no se nos apoyó en este proyecto, “para mí y para los problemas ecológicos que se presentan en el municipio, sería lo ideal”.
Además del reciclado, los pepenadores sacarían un 80 por ciento de ganancia que beneficiaría el bolsillo de estas personas y el Ayuntamiento no tendría que invertir en la compra de otro espacio, “porque insisto, la solución para el problema del relleno sanitario, es un proyecto productivo que beneficie a los dos grupos que pepenan ahí”.
Aspecto contaminante
El síndico municipal, Humberto Urby Genel, dijo que el manejo de los reciclables se da con los pepenadores o sin ellos. “Ellos querían tener una pequeña planta para el manejo de estos productos, como negocio personal”.
Considera que si no son ellos, existe una gran cantidad de gente que acude en sus vehículos y les compra el material reciclable, “que en cierta medida no es contaminante, porque se sigue utilizando, pero lo que queda ahí, contamina aunque se digan mil cosas”.
La verdad, indica, es que un terreno que fue utilizado como tiradero municipal, no podrá utilizarse durante cientos de años para otra cosa. El problema de fondo es el aspecto contaminante, “que es la justificación de los rellenos sanitarios”.
