MÉXICO, DF, (EFE).La actriz Jessica Lange, embajadora de Buena Voluntad de Unicef, cree que en el mundo no hay un país sin casos de abuso y maltrato a niñas y niños, un problema global que tampoco distingue condiciones sociales y económicas.
"Creo que tenemos que ser muy claros al decir que (el abuso a menores) es un fenómeno que no sólo se da en los países poco o menos desarrollados", dijo la actriz estadounidense, de 54 años, en visita a México.
En una entrevista con EFE, la intérprete de "King Kong" (1976), "El cartero siempre llama dos veces" (1981), "Tootsie" (1982), por la que ganó el Oscar a la mejor actriz secundaria, y "Blue Sky" (1994), con la que obtuvo el Oscar a la mejor actriz, entre otras películas, explicó que la prioridad de cualquier gobierno debería ser buscar las condiciones para crear un medio en el que se proteja a los menores de edad.
Lange criticó al Gobierno estadounidense por haber permitido que haya millones de pobres en el país, muchos de ellos de corta edad, sin que reciban siquiera las atenciones mínimas de las instituciones de protección social, a pesar de la aparente riqueza de su sociedad.
"Incluso en las familias más pudientes y con más cultura hay casos de abuso", afirmó la actriz, quien recalcó que éstos y los malos tratos "no están limitados a factores sociales y económicos".
Lange, que lleva apenas un año como embajadora del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), elogió el trabajo que ha hecho esta agencia de Naciones Unidas en Estados como la República Democrática del Congo, que visitó en agosto de 2003.
"(Allí) el único recurso, refugio, seguridad, sistema de salud, educación, que se da a la gente es a través de Unicef y de las ONG, en un país donde el Gobierno ha colapsado totalmente", dijo.
Lange recordó de su primer viaje con Unicef la precariedad que encontró e indicó que muy pocos entre quienes no han vivido esas situaciones se dan cuenta de que "después de años y años de guerra civil y de milicias, hay muy poca estructura legal: no hay justicia, ni servicios sociales".
Para la actriz, las poblaciones de esos países, especialmente las mujeres y niños, "saben que sin paz nada puede existir" y subsisten con esa creencia y esperanza tan básica y necesaria a la vez.
Añadió que en los casos de violencia sexual, con violaciones y mutilaciones, "no hay ninguna protección legal ni recurso, ni modo de llevar a quienes perpetraron los crímenes ante la justicia", lamentó.
Con situaciones así, la actriz plantea que sólo si se trabaja en las capas más altas de la sociedad, con quienes hacen las leyes, y en los estratos bajos, donde están los problemas reales, se podrán solucionar los abusos, carencias y malos tratos a la infancia.
Lange reconoció no estar aún lo suficientemente familiarizada con los problemas de México, pero animó a las Administraciones Públicas de este país a tratar de erradicar los abusos con campañas como "Abre los ojos, no cierres la boca", que promueve las denuncias de cualquier testigo de situaciones abusivas.
"Claramente si la gente mira, puede identificar lo que no es ordinario. Lo que hay que hacer es trabajar desde la base todo el camino hacia arriba, y en lo alto están los parlamentarios", añadió la actriz, invitada a la 110 Asamblea de la Unión Interparlamentaria (UIP).
Preguntada sobre qué siente al ver que en la Ciudad de México hay multitud de niños entre los artistas callejeros que se ganan la vida en los semáforos, dijo que en cualquier lugar esa circunstancia denota la existencia de desigualdad e injusticia.
"La idea de que los niños tienen que ganarse la vida en la calle habla de que algo está muy mal en la sociedad. Deberían estar en la escuela, siendo educados, en casa recibiendo el cuidado de sus padres, protegidos. Esas situaciones demuestran el fracaso de la sociedad y de los gobiernos", afirmó la actriz.
