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MÉXICO, DF.- Con una mueca que delataba más pena que egolatría y en ocasiones hasta con las mellijas rojas y la mirada esquiva, el actor estadounidense Tom Cruise hizo acto de presencia frente a sus fans mexicanos.
La tarde de ayer en el Auditorio Nacional, el actor, quien visitó por primera vez México, compartió más de hora y media para repartir autógrafos, fotografías, abrazos y saludos de mano con poco más de 300 personas que en punto de las 16:00 horas ya lo esperaban en las escaleras del recinto.
El actor, quien protagoniza la cinta Colateral: Lugar y Tiempo Equivocados, llegó al lugar a las 17:15 horas en una camioneta y no perdió tiempo, enseguida se puso a firmar los cientos de posters, libros, fotografías y toda clase de libretas que se le pusieron en frente.
Con sencillez y regalando una sonrisa todo el tiempo, Tom se detuvo durante más de cinco minutos cada vez que avanzaba por la alfombra, mientras que sus admiradoras le gritaban cosas como: "Papacito", "Pastelito" y "Estás bien bueno", entre otros piropos que el actor entendió a pesar de su escaso dominio del español.
Aunque la tarde presentaba pocos admiradores a lo largo de las escalinatas del coloso de Reforma, éstas se fueron llenando con curiosos que a su vez se preguntaban qué estrella pasaba por ahí. Algunos se dijeron incrédulos por que fuera Cruise, mientras que otras jóvenes salieron gritando del tumulto de personas asegurando haberle estrechado la mano y otras hasta haberlo besado.
Con camisa azul, chaqueta y pantalón de piel negra, el actor no escatimó en saludos para sus fans, quienes en algunos momentos se empujaron contra las vallas para intentar tocarlo, en tanto los conductores Roxana Castellanos y Eduardo Videgaray pedían que demostraran un poco de educación frente al actor.
Protegido por diez guaruras privados y 20 más de la seguridad del recinto, el actor continuó su recorrido hasta la sala del auditorio para presenciar la premier de la película dirigida por Michael Mann, que en México se estrena para todo el público el próximo viernes.
Cerca de las 18:00 horas, figuras del espectáculo nacional como Diana Golden, Kenny, Eduardo Arroyuelo, Rodrigo Abed, Ana Layevska y Marintia Escobedo, entre otras, comenzaron a llegar.
Algunos se declararon admiradores "de hueso colorado" del actor, como Golden, quien dijo que le gustaron las dos películas de Misión Imposible realizadas por el ex esposo de Nicole Kidman.
El actor estadounidense no perdió el tiempo y en cuanto hizo acto de presencia en el escenario del Auditorio Nacional dio su mensaje al público: "Hola, gracias, en verdad muchas gracias por venir esta noche. Es un honor estar aquí... ¡Viva México!".
Ante al menos cinco mil personas, del total de los nueve mil boletos que la distribuidora regaló al público, el actor de películas como Misión Imposible y El Último Samurai mostró su agradecimiento luego de dos horas de repartir autógrafos, tomarse fotos, abrazar y saludar a sus fans.
En el desfile de la alfombra roja más largo que se ha visto en México, Cruise se dio a querer por sus admiradores mexicanos.
El actor fue objeto de las muestras de cariño de la mayoría de jovencitas, jóvenes y señoras, así como de galanes ejecutivos, quienes incluso acompañaron a sus novias a pedir un autógrafo del astro hollywoodense, sin importarles que éstas gritaran desesperadas: "I love you Tom".
Julissa, de 21 años, se dijo tan emocionada que hasta se atrevería a preguntarle cómo es que Nicole Kidman lo dejó escapar; así como ella, muchas de las jóvenes que se hicieron presentes no dudaron en gritarle piropos al estadounidense, quien horas antes, al final de la conferencia de prensa que ofreció, prefirió no responder si se consideraba un "sex symbol", sólo se ruborizó.
