Niegan gravedad de actuación
La maestra les había dado permiso de platicar. Ana Laura Reséndiz Torres e Iván Alejandro Reveles Barrios, en su tercer grado de primaria, como niños, comenzaron a platicar más de lo debido.
Sus miradas tuvieron que agacharse ante sus compañeros de pupitre por la vergüenza de haber sido callados con cinta adhesiva que les colocó en la boca la maestra Cristina Piedra Medina.
Dice Ana que fue la única vez.
- ¿Qué más les hacía?
- También nos sacaba fuera del salón.
- ¿Les pegó alguna vez?
- No, pero sí nos estiraba de la ropa.
Para la directora de la escuela Gregorio Torres Quintero, de la colonia José López Portillo, Lourdes Velázquez Romero, la situación no fue grave, pues se solucionó para Iván, que fue cambiado del tercero ?B? al tercero ?A?. Lo pidió la madre, Guadalupe Barrios Sánchez.
Ahora el niño ya sonríe y se siente mejor y va con entusiasmo a la escuela.
Barrios Sánchez dijo a este medio que la maestra se portó grosera.
Aceptó acudir a la escuela y manifestar su inconformidad frente a El Siglo de Durango. Ya en ella se rehusó, dijo no estar en casa, le dio miedo.
En la escuela, Lourdes Velázquez ya sabía que este medio de información iba a investigar los casos expuestos. Se negó a que Iván fuera entrevistado para verificar la veracidad de su dicho.
Permitió la entrevista con Ana. Ella, tímida, afirma que la maestra Cristina se enoja a veces con ellos y que básicamente sus agresiones han sido sólo al sacarlos del salón cuando los estira de sus ropas, pero no pasa a mayores.
Niega que Iván haya sido golpeado. Las agresiones fueron manifestadas por Guadalupe Barrios.
Marisela Torres Nevárez, madre de Ana, recibió disculpas de la maestra Cristina. Ella aceptó su error y prometió no poner más cinta adhesiva en la boca de los niños.
Ana dice que Iván se sentía triste y que ya no quería ir a la escuela, porque incumplía con sus tareas y porque platicaba mucho con su amiga ?Diana?.
Aunque a Ana su maestra le cae bien, no quiere que vuelva a pasar lo de la cinta adhesiva, pues no le parece correcto.
La vez que Guadalupe Barrios platicó con los niños frente a maestros en su salón, Cristina amenazó a los niños. ¡Yo sé quién anda de chismoso!, lanzó el ultimátum, mucho antes del encuentro.
CONFLICTO
La opinión de la Directora
Para la directora de la escuela primaria Gregorio Torres Quintero, Lourdes Velázquez Romero, la maestra Cristina Piedra Medina es una persona muy sensible y que siente que fácilmente la atacan.
Dice que este año le tocó un grupo muy difícil y fue presionada por los padres de familia.
- ¿Podemos platicar con la maestra?
- No lo considero correcto, ella no aguantaría? lloraría? se sentiría atacada.
No se obtuvo la opinión de la docente. La Directora, madre de familia de niños de tres y un año, consideró que ella tampoco toleraría que maltrataran a sus hijos o que los callaran con cinta adhesiva.
- Me sentiría muy mal.
Finalizó.
