AP
BAGDAD, IRAK.- Un atacante suicida hizo explotar un coche-bomba ayer cerca de un hotel de la ciudad de Basora cuando pasaba por su lado una patrulla militar británica, matando a tres transeúntes.
El atentado fue el más reciente de una serie y tuvo lugar justo antes del aniversario del comienzo de la guerra.
En Bagdad, mientras tanto, los militares estadounidenses disminuyeron la cifra de muertos del ataque suicida del miércoles en otro hotel de Bagdad. Dijeron que los fallecidos fueron siete y no 27, como habían informado inicialmente.
Un supuesto participante del ataque de Basora, ciudad ubicada en el sur del país y que había salido del vehículo instantes antes de la explosión, fue detenido por transeúntes que lo apuñalaron hasta matarlo, dijo el teniente coronel Ali Kazem, de la policía iraquí.
Los residentes del área capturaron también a otros dos sospechosos que habían visto salir del automóvil antes de la explosión. Los supuestos atacantes fueron arrestados luego por las fuerzas policiales.
Al menos 15 personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad, dijeron funcionarios hospitalarios.
Las ambulancias llegaron de inmediato a la zona, mientras la policía iraquí y las fuerzas británicas intentaban alejar del lugar a una multitud.
Dos hombres y un niño, todos iraquíes, murieron, dijo la policía. El cadáver del supuesto atacante suicida aún permanecía en el automóvil.
Ningún soldado británico resultó herido.
A diferencia de otras áreas iraquíes, Basora ha permanecido en relativa calma.
Los militares habían manifestado en un principio que 27 personas murieron en el ataque al hotel Jabal Lebanon de Bagdad.
El jueves, la coronel estadounidense Jill Morgenthaler colocó la cifra en 17 y el brigadier general Mark Kimmitt la redujo posteriormente a siete.
Kimmitt dijo que 35 personas resultaron heridas en el ataque del miércoles en Bagdad. Scott Mounce, un escocés de 29 años, murió, y otro británico resultó herido, dijo el gobierno de Gran Bretaña.
Rowsch Shawayas, miembro del Consejo de Gobierno, dijo que las autoridades iraquíes colocaban la cantidad de muertos en “alrededor de 20”.
Morgenthaler confirmó que fue un ataque suicida, pero dijo que tal vez el hotel no haya sido el objetivo porque el vehículo con la carga explosiva estaba en medio de la calle y no permanecía estacionado frente al hotel.
