EFE
BAGDAD, IRAK.- El hotel Sheraton de Bagdad fue alcanzado ayer, por un proyectil, según los servicios de seguridad del establecimiento, sin que se produjeran víctimas.
El cohete, que en un principio fue confundido con una granada de mortero, alcanzó la sexta planta de este lujoso hotel del centro de Bagdad, en el que están alojados numerosos ciudadanos extranjeros, sobre todo empresarios y periodistas.
Varios vidrios rotos cayeron sobre la sala de recepción del hotel desde las plantas superiores como consecuencia del impacto del proyectil, que dañó la fachada pero sin mayores consecuencias, según los servicios de seguridad.
El Sheraton, situado junto al hotel Palestina, a orillas del río Tigris, está protegido por tropas estadounidenses en prevención de ataques de la resistencia iraquí y rodeado de barreras de hormigón y alambradas.
El ataque, ocurrido poco antes del amanecer, pudo ser oído desde otros hoteles del centro de Bagdad, donde se escucharon además varias explosiones de origen desconocido.
Un portavoz del Ejército de ocupación estadounidense confirmó que había habido un ataque pero no pudo ofrecer más detalles.
El Sheraton ya ha sido atacado en ocasiones anteriores por la resistencia iraquí. Además de los ataques del 27 de octubre y el 24 de diciembre, cuando no se produjeron heridos, el 21 de noviembre fue alcanzado por los disparos lanzados desde la calle mediante un carro-bomba, tirado por un burro.
En ese ataque resultó gravemente herido un empresario estadounidense, mientras que un empleado iraquí del hotel sufrió varios cortes profundos al ser alcanzado por los vidrios rotos.
