14 de abril de 2004.
Washington, (EFE).- El alcohol causa daños cerebrales graves tanto a los llamados bebedores sociales como a los alcohólicos empedernidos, según un estudio publicado en la revista "Alcoholism: Clinical & Experimental Research.
Científicos de la Universidad Vanderbilt de Tennessee y de la Universidad de California indicaron en la publicación que el examen de 98 personas que consumieron más de 100 bebidas alcohólicas en un mes reveló daños evidentes y problemas de lectura, desequilibrio y otras funciones.
Se define como una bebida un vaso de licor, de vino o una botella de cerveza.
"Los grandes bebedores sociales no reconocen que su nivel de consumo necesita tratamiento médico", dijeron los investigadores en el estudio.
En su investigación, los doctores Dieter Meyerhoff y Peter Marin aplicaron resonancia magnética a 46 bebedores crónicos y a 52 bebedores sociales para determinar el nivel de sustancias químicas cerebrales y las estructuras vinculadas a una función cerebral saludable.
Después, esos mismos bebedores fueron sometidos a pruebas de inteligencia verbal, velocidad de procesamiento, equilibrio, memoria activa, función espacial, función ejecutiva, aprendizaje y memoria.
"Los bebedores sociales mostraron un importante desequilibrio en las pruebas de memoria activa, velocidad de procesamiento, atención, función ejecutiva y equilibrio", dijeron los investigadores en su informe.
Por otra parte, la medición de sustancias y estructuras cerebrales mostró el mismo tipo de daño que han sufrido quienes se han visto obligados a ingresar a un hospital o a un centro de tratamiento para gente alcoholizada, añadieron.
Martin y Meyerhoff dijeron que el estudio mostró indicios de desequilibrio cerebral que los bebedores no advierten.
"Nuestro mensaje es: beba con moderación. La bebida en exceso daña su cerebro. Aunque el daño sea leve, éste perjudica su funcionamiento cognitivo de una forma que no es notada de inmediato. Por seguridad, no exagere", aconsejan los investigadores.