LA HABANA, CUBA, (Notimex).Convencido de la revolución socialista, de su fe cristiana y en busca de nuevos retos como lo será su próximo libro de cuentos, el cantante cubano Amaury Pérez asegura que con "un año sin bloqueo, Cuba sorprendería al mundo".
"Hay maravillas aquí, hace falta que nos dejen un poquito de tranquilidad... que nos levantemos sin ese amago de bota que nos tienen los norteamericanos, con un añito que nos den de aquí saldrían los mejores músicos del mundo", dijo el autor de "Si yo pudiera".
Con 50 años de edad, cumplidos a finales del año pasado, varios reconocimientos a su labor y casi 30 de actividad artística, Amaury no cesa en su empeño creativo y se apresta a publicar su primer libro de 23 cuentos de ficción: "Los laterales de la espuma". "Son cuentos breves, bastante de moda, el cuento es un género muy maltratado, el lector prefiere la novela ... es curioso pues con la inmediatez que corren las noticias, sería más lógico que la gente leyera cuentos", explicó.
A unos metros del estudio donde prepara su disco 23, el compositor advirtió: "He querido empezar con un cuento y tengo en proyecto una novela. Si la historia del cuento sale bien y no me critican mucho, entonces me aventuraré a publicar la novela".
Amaury, quien al hablar refleja una jovialidad que no parece de un tipo que está "poco más allá de la mitad de su vida", precisó que su ingreso a la literatura no es "una vía alternativa, sencillamente quiero completar la expansión de mi persona".
"Yo nunca dejaría la música ... quiero completar la expansión de mi persona, de mi espíritu que está tan lleno de cosas. Me gusta mi espectáculo, me gusta conducir programas de televisión, me gusta hacer canciones y escribir", puntualizó.
Dijo que junto a su "vena" literaria prepara la segunda parte de un tríptico que se llamará "Juglar", que tendrá como primer tema la canción "México", "un poco en busca de buena suerte" y para reflejar lo que representa ese país y su gente en 25 años de relación.
"Juglar", que espera concluir a finales de marzo, se sumará al primer material del tríptico "Trovador", que fue producido por Silvio Rodríguez, y al cual le seguirá "Bardo", cuyo material ya prepara.
Al hacer un breve recuento de sus actividades, recordó que al mismo tiempo produce un disco para la cantante cubana Miriam Ramos, quien grabará algunos de sus temas, por lo que "voy a estar todo el año metido en el estudio".
Sin embargo, eso no evitará que visite México como hace desde hace cinco lustros, pues "cantar en México tiene una importancia capital para cualquier artista. Puedes pasar la vida sin ir a Brasil a cantar, pero no puedes pasar tu vida sin ir a México".
"Jamás he recibido tanto cariño y complicidad, entrega y fidelidad, ni aquí (en Cuba) como en México. México no es mi segunda patria, es mi patria alternativa, es tan mi patria como esta", enfatizó el autor de "Abecedario".
Al referirse a la Nueva Trova, movimiento musical al cual se le vincula junto con cantantes como Silvio Rodríguez y Pablo Milanés, Amaury consideró que esa corriente musical sufre fluctuaciones "como todo".
Recordó su pináculo a partir de los movimientos revolucionarios que estaban en efervescencia, sin embargo, "los hijos de quienes nos vieron, hoy son el público que acude a nuestros conciertos", lo cual justifica los 50 conciertos que realiza al año.
El autor de "La Habana Mía" rechazó que en estos años haya cambiado la temática de sus canciones.
"Siempre tuve claro que no debía hacer canciones circunstanciales... y entonces le canté a valores permanentes: el amor, el desamor, los amigos, el barrio, la familia", destacó.
"He intentado todo el tiempo, hasta donde he podido, no llevar canciones adulatorias a los procesos revolucionarios, que se regaron por América Latina como pólvora, ni he cantado canciones criticas a ningún proceso revolucionario, ni al nuestro al que estoy adscrito", acotó.
Luego de rechazar cualquier tipo de censura, el cantante y ex entrevistador de televisión rechazó que esa posición sea porque carezca puntos de vista al respecto, pero "tampoco soy un fanático, soy católico, pero tampoco soy un fanático".
"Canté a esos fenómenos que en cualquier sociedad permanecen inamovibles" y por ello "yo he sido muy afortunado. Le he pedido a la vida muchísimo menos de lo que la vida me dio", sentenció el cantante cubano.
Al hablar de la vigencia de esa Nueva Trova, ahora un poco empolvada, Amaury defendió: "Después de la generación nuestra vino una virtuosa, pero que cayó en un momento malo en el mercado".
Ahí están, dijo, Santiago Feliú, Carlos Varela, Gerardo Alfonso, Alberto Roca, Frank Delgado, "muchachos que tienen un talento musical, muy superior, incluso al nuestro, pero que no han tenido oportunidad y después de ellos hay una nueva generación".
Con la prisa de una vida, donde el "90 por ciento es trabajar", el cantante sentenció "creo que hay un nuevo momento (en América Latina), después de tener casi una dictadura en cada país", ahora se levantan cuatro o cinco cabezas en busca de una nueva realidad.
De esta manera, dijo, "voy a quitar a Fidel (Castro), porque él siempre ha tenido la cabeza erguida, (pero) se levanta un Luis Inácio Lula da Silva, un Hugo Chávez, un Nestor Kirchner".
Ahora, con la misma prisa con la que llegó, Amaury recordó: "ya hice un disco en salsa que se llama ?Algo en Común?, hubo una resistencia, la gente creía que me quería convertir en sonero, pero sólo quería hacer un homenaje a nuestra música, se malinterpretó".
