Advierte Juan Ramón de la Fuente que presiones políticas y económicas podrían desvirtuar a las instituciones.
SUN-AEE
MEXICO, DF.- El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Juan Ramón de la Fuente, reconoció que ante las presiones políticas y económicas del país las universidades están en riesgo de perder la brújula y tomar una orientación diferente, con lo que correrían el riesgo de desnaturalizarse.
En tal sentido, subrayó “que la Universidad no puede ser una institución que se pliegue ni a los dogmas ni a las doctrinas, ni a los intereses políticos en boga, ni a las leyes económicas que hoy ejercen una enorme influencia sobre la vida de todos los países”.
Durante la inauguración de las jornadas culturales “Universidad y Sociedad” que organiza la Universidad del Claustro de Sor Juana, De la Fuente insistió en que dichas instituciones deben preocuparse por preservar su misión académica, libertad, autonomía e independencia, la complejidad en la que la sociedad esta inmersa.
Defendió la autonomía de las universidades públicas y señaló que el Estado debe respetar sus decisiones y no entrometerse en éstas.
Por su parte, estas instituciones deben rendir cuentas de la forma en que administran sus recursos, agregó.
“Es verdaderamente absurdo pensar que México puede tener un desarrollo digno, independiente y completo, si no seguimos nutriéndonos de esa enorme riqueza que representa para el desarrollo integral del país el campo de las humanidades”, sostuvo.
Hay que reconocer que el mercado es necesario para el desarrollo económico de los países, pero también es bueno aceptar como parte de nuestra responsabilidad social y de nuestra capacidad reflexiva y crítica, que el mercado también genera exclusión, intolerancia, marginación y pobreza.
Ante la rectora de la Universidad del Claustro de Sor Juana, Carmen Beatriz López Portillo, el académico mencionó que en el caso de la educación, este predominio absurdo del mercado tiene graves consecuencias y no se puede permanecer indiferente ante ello.
Explicó que la globalización ha motivado la proliferación de instituciones alternativas a la Universidad que aparecen como proveedoras de ciertos servicios, orientadas a competir en los mercados nacionales y mundiales.
En estas instituciones, agregó, predominan ciertas disciplinas y carreras que parecerían tener una mayor posibilidad de generar egresados que se inserten en los esquemas de la economía de moda.