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BOGOTÁ, COLOMBIA.- Un portavoz del Ejército de Liberación Nacional (ELN) advirtió ayer que este grupo suspenderá los acercamientos de paz con el Gobierno colombiano si descubre que los mismos son utilizados para impulsar una eventual reelección del presidente Álvaro Uribe.
La advertencia fue formulada por Felipe Torres, uno de los voceros de la agrupación rebelde y quien en octubre recuperó su libertad tras purgar una condena en prisión de 15 años, durante un foro de paz celebrado en Bogotá.
El jefe rebelde se expresó con cautela ante el futuro de las conversaciones con el Gobierno que se desarrollan con la colaboración de México, al subrayar los inconvenientes que amenazan su curso.
“Le deseo un buen augurio a este proceso y a estos inicios, pero sí veo muchos inconvenientes”, enfatizó.
El Congreso colombiano aprobó el jueves un proyecto de reforma constitucional que permitiría al jefe de Estado postularse a las elecciones de 2006, a las que llega como gran favorito, según encuestas.
El Gobierno colombiano y el ELN la segunda fuerza insurgente del país retomaron en mayo los contactos con miras a un proceso de paz con la ayuda de México, país que interviene en calidad de facilitador.
El presidente Uribe expresó ayer su confianza en alcanzar la paz con el ELN y destacó la mediación de México en la tarea.
El Mandatario expresó lo anterior a periodistas en la ciudad de Medellín (noroeste), en la que unas horas antes se informó que el ELN respondería a Uribe una invitación a reiniciar negociaciones de paz y solicitaba una solución a la crisis humanitaria en el país.
“Yo desearía que pudiéramos llegar rápidamente a un acuerdo de paz con esta organización”, dijo Uribe, al confirmar que había recibido la comunicación del ELN.
Francisco Galán, el vocero del ELN, que cumple una condena en la cárcel de Itaguí, propuso crear un estatuto humanitario que regule la guerra, “mientras encontramos una salida definitiva al conflicto”.
Aunque no dio más detalles, afirmó que cualquier acuerdo debía hacerse con la participación de toda la sociedad y criticó diplomáticamente la fumigación a los cultivos ilícitos de coca y las operaciones militares.
Por otra parte, el Ejército colombiano advirtió que continuará con los operativos de rescate de rehenes a pesar de la propuesta del Gobierno colombiano de liberar 50 rebeldes presos a cambio de unos 60 “secuestrados políticos” en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, primera fuerza insurgente).
Al término de una reunión con el presidente Uribe, el ministro de Defensa, Jorge Uribe, y los mandos policiales, los comandantes del Ejército de Colombia ofrecieron su respaldo a la decisión del Mandatario de “canjear” guerrilleros por secuestrados.
El comandante del Ejército colombiano, general Carlos Ospina, dijo que la “propuesta de canje del Gobierno no considera ningún despeje”, por lo que advirtió que el Plan Patriota la mayor ofensiva desplegada en décadas contra las FARC continuará en marcha.