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LA HABANA, CUBA.- El Gobierno cubano, tras restringir la circulación del dólar, aplazó por una semana el periodo para que los cubanos cambien la divisa norteamericana por una moneda local.
El plazo inicial era el ocho de noviembre, anunciado con una resolución del Banco Central de que no se podrá usar la moneda estadounidense para compras o pagos en efectivo en los comercios, como se realizaba desde hace una década.
Pero según una nota oficial dada a conocer en todos los medios de prensa ayer los cubanos tendrán una semana más para cambiar sus dólares a pesos convertibles sin pagar un impuesto de diez por ciento.
Aprobado en la década de los 90, el uso del dólar estadounidense en Cuba fue parte de un paquete de medidas aperturistas que sacó a la isla de la peor crisis de económica de su historia tras la caída de sus aliados soviéticos.
El Gobierno cubano dice que con la nueva medida recupera ?su soberanía? monetaria y que es necesaria ante las presiones de Washington sobre bancos extranjeros para que no operen con la nación caribeña.
La isla recibe una masiva cantidad de efectivo en moneda estadounidense por el turismo -una industria de 2,000 millones de dólares- y las remesas -unos 1,000 millones de dólares-.
Tras el anuncio surgieron quejas de que se verán perjudicados muchos cubanos que dependen de las remesas enviadas por familiares en Estados Unidos, pero las autoridades desestimaron esos comentarios.
?Las remesas seguirán llegando?, dijo el presidente de Banco Central Francisco Soberón hace algunos días. El funcionario descalificó también los augurios de otras dificultades a partir de las nuevas medidas, como una desaceleración económica o un auge del mercado negro.
Paralelamente, el Gobierno reconoció que estudia extender el uso del euro como moneda de pago.
