Amenaza el Parlamento con destituir de su cargo al Presidente de Nicaragua.
EFE
MANAGUA, NICARAGUA.- La misión del Consejo Permanente de la OEA que recabara información sobre la situación del presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños, amenazado de ser destituido por el Parlamento a petición de la Contraloría, llegó ayer a Managua.
Los integrantes de la misión, el presidente del Consejo Permanente de la OEA, Arístides Royo, y el secretario general interino del organismo continental, Luigi Einaudi, no hicieron declaraciones a la prensa a su llegada a la capital nicaragüense.
Royo y Einaudi, y un grupo técnico que lo acompaña, se trasladaron a la casa presidencial para reunirse con Bolaños.
El portavoz de la Presidencia, Lindolfo Monjarrez, informó de que Bolaños presentará a la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA), y esta noche a los nicaragüenses, ?todo lo que sea necesario para demostrar la transparencia con que siempre ha actuado?.
Monjarrez dijo que a la misión de la OEA ?se le presentarán todas las evidencias que el Gobierno de Nicaragua tiene y que demuestran cómo se ha venido cayendo en la ilegalidad y cómo han venido cerrando todos los cauces legales (al Presidente) los grupos parlamentarios manejados por los caudillos políticos del país?.
Agregó que la misión se entrevistará con los Presidentes de los poderes del Estado y los líderes de las principales organizaciones políticas del país.
Otras fuentes oficiales informaron de que la misión tendrá que presentar en Washington un informe sobre los resultados de su visita a Nicaragua.
Monjarrez se mostró confiado en que la misión rendirá un informe al Consejo Permanente en Washington que ?de a conocer la realidad de Nicaragua?.
La misión llegó a Managua cumpliendo un mandato de representantes de 34 países que, por unanimidad, acordaron enviarla el domingo, a solicitud de los presidentes de Centroamérica que celebraron en esta capital una reunión extraordinaria el pasado sábado.
La Contraloría General de Nicaragua (Fiscalía de Cuentas) pidió el pasado día siete la destitución de Bolaños por no colaborar con una auditoría realizada por este ente fiscalizador relacionada con los gastos de la campaña electoral de 2001.
La Fiscalía acusa a Bolaños de delito electoral por supuestamente utilizar dinero del Estado en la financiación de su campaña electoral, así como de recibir donaciones del exterior que no fueron reportadas al Consejo Supremo Electoral (CSE).
La auditoría reveló ingresos de más de 32 millones de dólares en cuentas de Bolaños y del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), primera fuerza política, pero el CSE sólo fue informado de 5.1 millones de dólares.
Bolaños ha negado reiteradamente haber cometido delitos electorales, y nunca ha querido revelar montos ni la identidad de quienes patrocinaron su campaña electoral, lo que se espera que haga hoy en una transmisión en directo por radio y televisión, según fuentes oficiales.
