México, DF.- El actor mexicano Andrés García aseguró que el teatro es un género del que nunca podrá desligarse porque es su pasión, razón por la cual reaparece en los escenarios, después de 16 años de ausencia, con la puesta en escena Yo Loco, Loco, aunque además aceptó que su regreso se debe también a cuestiones económicas.
En entrevista luego de la conferencia en la que se dieron a conocer los pormenores de la obra que se estrenará el próximo 13 de febrero en el Teatro Venustiano Carranza, de esta ciudad, bajo la producción de Salvador Varela, el histrión abundó que el teatro ?es mi vida, mi mundo, y es lo que sé hacer; pensé seriamente en dejar de trabajar pero me aburrí?.
En torno de los asuntos que tiene pendientes en Acapulco, Guerrero, y para los cuales necesita recursos explicó: ?Lo que pasa es que la lana se me acabó y dejé dos o tres obras inconclusas, mi castillo en Acapulco, una cocina y un bar, además de que me falta mucho para llegar a las diez cabañas, por eso estoy de nuevo en el teatro, para ver si me recupero. Tengo proyectos de televisión, de los cuales no hablaré?, señaló al tiempo de negar que se trate de una telenovela.
El protagonista de melodramas como Paloma, Tu o Nadie y El Privilegio de Amar aclaró que ?nunca me he retirado del teatro, lo hice fuera porque en la capital los foros siempre estaban ocupados, pero ahora estoy de regreso?.
Respecto a la obra, montada por primera vez en la ciudad estadounidense de Los Ángeles, California, hace 20 años por él, indicó que en esta ocasión compartirá créditos con las actrices Andrea Noli y Gabriela Goldsmith, así como con el comediante Manuel ?El Flaco? Ibáñez.
Manifestó su agradecimiento a Salvador Varela por creer en el proyecto, y a José Solé (quien por una traqueotomía debe hablar con la ayuda de un vibrador), por su apoyo y de quien dijo: ?Es un director de los mejores?.
Andrés García, que ahora luce con su cabeza completamente rapada, explicó que la puesta en escena, aunque tiene muchas variaciones, respeta la historia original del autor.
La obra, apta para toda la familia, fue adaptada por el propio actor que radica en el puerto de Acapulco, y maneja de manera picaresca y chusca diversas situaciones, salpicadas de amor, religión y hasta política.
?No es una obra moralista, es una comedia ligera al estilo francés que aborda la debilidad del ser humano y donde Manuel ?El Flaco? Ibáñez, hombre casado con una amante, empieza a conflictuarse cuando aparezco yo como el Loco?, resaltó García.
