El Siglo de Torreón
Gómez Palacio, Dgo.- Felipe de Jesús iba en su taxi y llevaba una pasajera a su trabajo cuando atendió una señal de alto. Unas llantas rechinaron, al voltear, el taxista vio como se levantaba la parte trasera de una camioneta blindada transportadora de valores, el vehículo dio una voltereta, la segunda fue más cerca y dañó su auto. Al recuperarse, Felipe vio también a la camioneta que embistió el pesado vehículo, los ocupantes resultaron ilesos.
En la esquina surponiente de Morelos y Justo Sierra se registró el triple choque que ameritó el cierre de las dos calles en tres puntos cardinales, coordinado por agentes de Tránsito. En medio de la vía, incrustado en el pavimento terminó volcado con las llantas al aire el vehículo blindado. A unos metros, María de Jesús Sillas González, de 29 años, se incorporaba luego de estampar su rostro con la bolsa de aire.
Por la calle se empezaron a esparcir los diferentes fluidos de la camioneta Ford de tres y media toneladas, dedicada al traslado de valores. El anticongelante verde, el aceite oscuro, solución de frenos y demás sustancias. Un ligero olor a gas inquietaba a los curiosos. La incertidumbre aumentó, los tripulantes de la camioneta blindada no salían, permanecieron encerrados, por ?seguridad?.
Agentes de la Dirección de Tránsito y Vialidad atendieron el llamado de emergencia registrado a las 10:00 horas. Salvador Ruvalcaba González, de 31 años, empleado del Servicio Panamericano de Protección fue detenido preventivamente. El custodio tripulaba el vehículo que acaba de recoger los valores de Teléfonos de México y no respetó la señal de alto, en la calle Justo Sierra.
Junto con María de Jesús, con domicilio en la calle Naciones Unidas 244 de la colonia Nogales, viajaba su hermano José, también su hija Ariel Ivonne Ramírez Sillas de siete años y el pequeño Salvador de cinco años. La Cruz Roja llegó pronto para atenderlos. En la parte trasera de la cabina, quedó la gorra azul del niño; en el tablero, las dos bolsas de aire colgaban luego de cumplir su función. María de Jesús dijo que siempre usa el cinturón de seguridad.
Según el croquis de los agentes de Peritos, la camioneta Ford Lobo modelo 98, color verde, sin placas, con un permiso provisional para conducir que venció el día 14 de noviembre, era tripulada por María de Jesús y se desplazaba con preferencia por la avenida Morelos de norte a sur.
Mientras una grúa con plataforma intentaba enderezar la camioneta blindada, un elemento de Tránsito informó que el vehículo transportador de valores era marca Ford modelo 2000, con placas EN 4193, número económico 99320, cuyo conductor, Salvador, vive en la carretera Jabonoso-La Unión que circulaba de oriente a poniente por la calle Justo Sierra.
Orillado en la calle en dirección poniente a oriente, permanecía el auto Dodge Atos modelo 2001, placas 8920 DYB, el cual sufrió daños al ser desprendida la polvera izquierda. Su conductor era Felipe de Jesús Chavarría, de 45 años, vecino de la calle Cuauhtémoc 150 en Ciudad Lerdo.
La camioneta Ford Lobo presentaba todo el frente compactado ya que agarró de llenó al vehículo blindado que recibió el golpe en la parte posterior derecha, posiblemente porque el conductor volteó al lado contrario de la preferencia en la avenida Morelos y pensó que tenía la vía libre.
Jovencita vuelca su auto
A las 8:05 horas, en el bulevar Miguel Alemán casi esquina con González de la Vega, una inexperta conductora perdió el control de su vehículo y chocó contra el camellón central de la vía, para acabar volcada con las cuatro llantas al aire.
En el lugar del accidente se detectó a quien dijo ser Jessica Adame Castillo, de 22 años, quien tripulaba un auto VW Pointer modelo 98, placas FYW 8090, color rojo.
El reporte del accidente elaborado por los elementos de Peritos indicaba que el auto era conducido por Nicolás Aviña, con domicilio en la avenida Hidalgo 1887 en Torreón.
Antes del accidente, el auto compacto se desplazaba de norte a sur por González de la Vega y al llegar al Miguel Alemán dio vuelta a la derecha en dirección a Ciudad Lerdo, y tuvo el accidente que llamó la atención de todos los automovilistas que pasaban por el lugar a temprana hora.
Estuvo cerca
Durante los 12 años que tiene trabajando como taxista, Felipe de Jesús Chavarría ha visto de todo. La mañana del lunes 15 de noviembre le tocó en primera fila un accidente. Unos metros hicieron la diferencia y evitaron que enfrentara una desgracia.
Entrevistado en la sala de emergencias de la Cruz Roja, el taxista de Ciudad Lerdo esperaba que lo dieran de alta. Fue más la impresión del accidente que el daño físico al que estuvo expuesto. ?Lo primero que hice fue preguntarle a mi pasajera si estaba bien?, dijo Felipe.
Entre los viajes habituales del trabajador del volante, está llevar a una trabajadora de una empresa de lácteos a la zona industrial de Gómez Palacio.
?La señorita me dijo que tenía mucha prisa y tuvo que irse, yo baje del carro y fui a ver a la señora de la camioneta?, comenta el taxista que no daba crédito a la escena. Una camioneta tumbó a una blindada.
Felipe dijo que la gente se acercó al vehículo transportador de valores, nadie salía, algunos querían asomarse, saber qué pasaba, para muchos es sabido que los custodios están armados, por eso se mantuvieron al margen.
?Hasta que llegó otra camioneta con sus compañeros salieron, creo que traían dinero, y tal vez es una política quedarse adentro hasta que llegue alguien, quién sabe?.
En la misma sala de emergencia permanecía recostada en una cama María de Jesús Sillas, la joven mujer no presentaba heridas o golpes visibles; en la cama contigua estaba su hija Ariel Ivonne, también recostada y serena.
El esposo de María de Jesús llegó a la Cruz Roja y platicó con su mujer, ella le dijo que iban al doctor, que todo fue muy rápido, que las bolsas de aire funcionaron de maravilla, y con el cinturón resultó ilesa.