Washington, (EFE).- La aparición de la figura de los abuelos, que ocurrió con el incremento de la edad de supervivencia en el Paleolítico Superior, mejoró las condiciones de vida de los hombres primitivos, según una investigación realizada en EEUU.
El estudio, que publica esta semana la revista "Proceedings", de la Academia Nacional de Ciencias, indica que hace entre 30 mil y 40 mil años en algunos grupos humanos aumentó la proporción de adultos mayores y esto mejoró las probabilidades de supervivencia y el crecimiento demográfico de esas familias y tribus.
Las antropólogas Sang-Hee Lee, de la Universidad de California, y Rachel Caspari, de la Universidad de Michigan, proponen la hipótesis de "la ventaja de las abuelas", refiriéndose a la generación más anciana que sobrevivió para conocer a sus nietos.
Para ello estudiaron los restos fósiles de 768 dentaduras humanas que incluyen especímenes de Cromañón y Neanderthal y también ejemplares prehomínidos, algunos de los cuales datan de hace unos tres millones de años.
El enfoque de estas antropólogas es original en el sentido de que, usando las técnicas ya conocidas para el cálculo de la edad de los individuos, elaboraron un índice que mide la proporción de humanos adultos mayores y de jóvenes en cada grupo.
Dividieron los fósiles en dos grupos, de acuerdo con la edad calculada para los individuos: los adultos en edad reproductiva a partir de los quince años, y los adultos mayores, es decir, a partir de los 30 años.
Entre los 353 especímenes de Australopitecus -un grupo variado de homínidos de amplia distribución que empezó a extenderse en Africa hace unos cinco millones de años-, las antropólogas encontraron 37 "viejos" y 316 jóvenes, lo cual da una proporción de 0,17 adultos por cada joven.
El estudio de 208 restos Homo Erectus -que se calcula vivieron hace unos 1,8 millones de años- encontró que la proporción de adultos mayores a jóvenes aumentó a 0,25.
Los 133 especímenes de Neanderthal -un tipo temprano de Homo Sapiens que se extinguió hace unos 35.000 años- registran otro incremento leve de la proporción de "viejos" a jóvenes: 0,39 adultos mayores por cada joven.
Las científicas encontraron que los 74 especímenes correspondientes al temprano período del Paleolítico Superior, hace unos 30 mil años, muestran un incremento sustancial de esa proporción, que pasó a ser de 2,08 adultos mayores por cada joven.
"La longevidad puede ser necesaria para la acumulación y transferencia de información de una generación a la otra, que ocurre en sistemas familiares y otras redes sociales complejas que son características de los humanos", indica el artículo.
Y esa longevidad -no en el sentido de cuál era la expectativa máxima de vida, sino la proporción de adultos que llegan a viejos- "es un punto central de la hipótesis de la abuela", señala.
Según esta teoría "el incremento de la longevidad es importante para la buena condición de las abuelas que, participaban en la edad reproductiva de sus hijas y los hijos de éstas", añade.
Fue, quizá, el momento en la historia humana cuando empezó a jugar un papel social relevante el fenómeno exclusivamente humano de la menopausia: las mujeres que ya no estaban en edad reproductiva todavía estaban en condiciones de ocuparse de sus nietos y otros miembros de la familia.
