12 de febrero de 2004.
Bagdad, (EFE).- El enviado de Naciones Unidas en Irak, Lajdar Brahimi, manifestó hoy que la ONU apoya la exigencia del máximo líder del chiísmo iraquí, el gran ayatolá Ali Sistani, para celebrar elecciones en Irak, sin precisar fechas.
En declaraciones a los periodistas en Nayaf tras una reunión con Sistani, Brahimi dijo que el dirigente chiita aún insiste en que se convoquen comicios directos antes del traspaso de poder, previsto para el 30 de junio según el plan de EU.
Brahimi encabeza una misión de expertos de la ONU que llegó el sábado a Irak y ya se ha reunido con miembros del Consejo de Gobierno (CG) provisional y con responsables de la Autoridad Provisional de la Coalición encabezada por el estadounidense Paul Bremer.
El principal objetivo del equipo internacional es estudiar la viabilidad de convocar elecciones en el tiempo que queda hasta el 30 de junio, fecha prevista para el traspaso de poder a un gobierno iraquí que sería elegido por asambleas provinciales de notables.
Estados Unidos, artífice del plan, considera que es inviable llevar a cabo elecciones generales antes de esa fecha.
Por su parte, los líderes de la minoría suní de Irak han manifestado que no participarán en comicios organizados por las fuerzas de ocupación.