LONDRES, (Reuters).-Un británico que accidentalmente se disparó en los testículos tras haber bebido siete litros de cerveza, fue enviado a prisión por cinco años, por posesión ilegal de un arma de fuego, dijo el portavoz de una corte.
David Walker, de 28 años, estaba discutiendo con un amigo en un pub de South Yorkshire, en el norte de Gran Bretaña, y salió intempestivamente hacia su casa donde tomó su escopeta recortada, que se metió entre el pantalón y la cintura.
Al encaminarse de nuevo al pub, la escopeta se disparó y los perdigones se le incrustaron en los testículos.
Los médicos que lo atendieron en la sala de emergencias, tuvieron que remover los restos que quedaron de testículos.
Walker admitió poseer un arma ilegal de fuego, durante el juicio que se le siguió en en la corte de Sheffield.