11 de marzo de 2004.
Valparaíso, Chil), (EFE).- En el último capítulo de una controversia que comenzó en la década de 1890, el Parlamento chileno selló hoy la aprobación de una ley que incluye, por primera vez en la historia del país, el divorcio.
La Cámara de diputados aprobó sin cambios el texto de la nueva Ley de Matrimonio Civil, que el Senado había despachado el pasado 22 de enero, pero que había comenzado en 1995 su tramitación legislativa y que desde entonces estuvo varias veces a un tris de fenecer.
Muchas veces durante el Siglo XX murieron en el Parlamento proyectos que establecían el divorcio como mecanismo para reglamentar las rupturas matrimoniales.
Aunque en Chile la separación del Estado y la Iglesia Católica se estableció en 1925, esta última mantiene una poderosa influencia que situó a Chile como el último país de cultura occidental que aprueba el divorcio.
Los contrarios al divorcio -la Iglesia incluso lanzó campañas por televisión- nada decían, sin embargo, frente a la anulación matrimonial, basada en un fraude y usada preferentemente por sectores pudientes, pues supone fuertes gastos.
La anulación consiste en desconocer la jurisdicción del oficial civil que celebró el matrimonio, sobre la base de que algún dato- generalmente el domicilio de la novia-, no era verídico, y bastaban dos testigos, generalmente falsos, para darle validez.
En los sectores pobres, las mujeres suelen, tras unos años de abandono, declarar la "muerte presunta" del marido, que se oficializa con anuncio durante tres días en un diario, y una vez convertidas en viudas legales pueden acceder a beneficios sociales para los hijos o volver a casarse.
Sobre esa base, el ministro de Justicia, Luis Bates, calificó el trámite de hoy como "un hito histórico para el país".
La nueva ley, que reemplaza a otra de 1884, "va a fortalecer el matrimonio y a la familia", subrayó Bates, a cuyo juicio, según dijo a EFE, la nueva ley "no es solamente el divorcio" y llamó a la prensa y a las autoridades a realizar "una buena pedagogía" para que la ciudadanía conozca los alcances de la norma.
Asimismo, celebró que el proyecto haya sido aprobado el día en que el gobierno de Ricardo Lagos cumplió su cuarto aniversario. El mandatario socialista promulgará el cuerpo legal dentro de 30 días y entrará en vigor seis meses después.
También estaba muy satisfecha la ministra de la Mujer, Cecilia Pérez, al considerar la iniciativa supone un paso significativo en la emancipación femenina. "Miles de mujeres están atrapadas en una sociedad conyugal que no les permite hacer trámites ni gestiones comerciales o empresariales sin la comparecencia del esposo, que las ha abandonado hace muchos años", dijo Pérez.
Añadió que la ley "establece todas las medidas necesarias para proteger los derechos del cónyuge más débil y de los hijos". La diputada socialista Isabel Allende, que hoy dejó la presidencia de esa Cámara legislativa, respondió a los detractores de la ley señalando que no es la que va a causar el divorcio. "La gente se separa cuando una relación amorosa se ha roto, no porque hay o no hay una ley", precisó la hija del fallecido presidente Salvador Allende.
El divorcio será concedido tras una espera de un año si es solicitado por ambas partes y de tres años si la demanda es unilateral y se establece sobre la base de incumplimiento grave de deberes y obligaciones.
Entre las causas para invocarlo se incluyen el incumplimiento grave de los deberes y obligaciones para con el cónyuge o los hijos, como maltratos graves, la transgresión de los deberes de convivencia, socorro y fidelidad o si la homosexualidad, el alcoholismo o la drogadicción impide la convivencia. También cuando por ésas u otras causas haya cesado la vida en común.
Otro punto controvertido que se aprobó es el reconocimiento civil de los matrimonios religiosos, oficiados por asociaciones que tengan personalidad jurídica, a condición de que sean inscritos en el Registro Civil en un plazo máximo de ocho días.
Las aprensiones surgen del hecho de que en Chile actualmente hay 200 iglesias que cuentan con personalidad jurídica y más de 700 solicitudes de otros credos aún están siendo tramitadas.