POR MARÍA ELENA HOLGUÍN
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Tras haberse logrado la declaración del Cañón y la Sierra de Jimulco como Área Natural Protegida, se trabaja en la elaboración de algunos proyectos tendientes a preservar la naturaleza de esa región y al sustento económico de las familias que ahí residen.
El encargado de la Comisión de Ecología y Salud del Ayuntamiento, Roberto Sánchez Viesca, informó que con dichos proyectos se pretende poner en práctica la declaratoria de Área Natural Protegida, mediante acciones que contribuyan a la preservación del medio ambiente en toda esa zona.
En la actualidad se trabaja en el diseño de proyectos productivos bio sustentables, para la siembra de determinados productos como plantas endémicas de la región, entre las que destacan el sotol y la noa.
Se busca hacer una explotación racional del orégano, considerada como una de las principales actividades que desarrollan los pobladores del Cañón y la Sierra de Jimulco a través de la extracción del aceite de esta planta y promover su exportación a países europeos, donde se emplea en la elaboración de perfumes.
En este sentido, Sánchez Viesca refirió que en Europa los fabricantes de perfumes pagan entre siete mil y ocho mil dólares por un litro de aceite de orégano; los productores de Jimulco obtienen tan sólo de seis a siete pesos por cada kilogramo, a pesar de que se necesitan 40 kilogramos de éste para obtener un litro de aceite.
En el desarrollo de este proyecto se espera contar con el apoyo y la intervención de investigadores de la Universidad Autónoma de Coahuila y de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, así como del Gobierno Municipal por medio de la Dirección de Desarrollo Rural, instancia que podría aterrizar recursos de algunos programas e intervenir en la solicitud del permiso de exportación.
Por otra parte, se contemplan algunos programas de desarrollo turístico de la región, lo cual se puede lograr mediante la preparación de los mismos habitantes como guías turísticos, según indicó el séptimo regidor.
También se busca desarrollar programas de ecoturismo para escalar montañas; la construcción de cabañas para descanso y que se pueden complementar con la práctica de algunas actividades como cabalgatas o baños de temascal.
Dentro del Cañón y la Sierra de Jimulco ya se definieron las áreas núcleo que serán empleadas en labores de investigación y las que ni siquiera deberán ser tocadas por la mano del hombre.
La declaratoria de área natural protegida contempla una extensión de 60 mil hectáreas.