Esperan el resultado de la declaración ministerial en torno al homicidio de José Jesús Luévanos Valdez.
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Para ejercer acción penal en su contra, serán arraigados en Hermosillo Sonora, José Antero Montes Pámanes alias “El Anter”, José Medrano Rendón alias “El Cactus” y su hermana, Hilda Rocío Medrano. Los presuntos asesinos serán procesados por el delito de robo con violencia en la vecina entidad, mientras se espera el resultado de su declaración ministerial, en torno al crimen de José Jesús Luévanos Valdez.
Joaquín Saucedo Flores, titular de la Subprocuraduría de Justicia en la Comarca Lagunera de Durango, informó mediante los oficios de colaboración que existen entre las procuradurías de los Estados, que se envió un listado con cuestionamientos especiales relacionado con el crimen del joven “yonquero” de 28 años.
A las 21:00 horas del martes, el funcionario estatal recibió un comunicado donde “El Anter”, “El Cactus” e Hilda Rocío, se declararon confesos del brutal asesinato cometido en la calle Luis J. Garza 283, de la colonia Valle del Nazas, el pasado 28 de junio del presente año.
Durante la tarde del miércoles, Saucedo Flores fue enterado que en Hermosillo, “El Anter” se declaró como el único responsable de la muerte de José Jesús. De tal forma, las autoridades analizan la posibilidad de consignar a los radicados en Sonora por homicidio calificado y robo con violencia y a los arraigados en Ciudad Lerdo, por omisión de auxilio y encubrimiento.
Saucedo Flores señaló que con la postura de José Antero, es muy probable que cambie la situación jurídica de los jóvenes arraigados en Ciudad Lerdo, Jesús Antonio Luna Vázquez, de 20 años y Marco Antonio Rodríguez González, de 21 años.
También se aclaró que no basta con la afirmación del inculpado en Sonora, para involucrar o exentar a los arraigados, que son empleados de un bar. El factor clave está en determinar la propiedad del gas lacrimógeno y el bat metálico, utilizados como aditamentos de seguridad en la cantina y que estaban en la escena del crimen.
Asaltan joyería, se cambian los nombres
El día 20 de julio de 2004, se registró un robo con violencia en la joyería “La Perla”, localizada en la calle Garmendia, en la zona centro de Hermosillo, Sonora. El botín fue de 200 piezas de oro que no han sido valoradas. La Policía logró la detención de un tipo que dijo era menor de edad y se llamaba Jesús González Amador.
Guillermo Lachica Campoy, jefe de grupo de Asaltos Norte-Poniente, en coordinación con el comandante, Juan Manuel Pavón Félix, del Grupo Jaguares de la Policía Judicial del Estado de Sonora, colaboró con las autoridades de Durango para la captura de los presuntos homicidas.
Mediante fotografías, agentes de Sonora lograron identificar a Hilda Rocío Medrano, como la mujer que decía llamarse Gabriela González Amador, hermana de Jesús González, que visitaba con frecuencia a su hermano en el Consejo Tutelar de Menores (Cotume).
Fue así como las autoridades lograron determinar que Jesús González era en realidad José Medrano Rendón, quien incluso proporcionó una edad menor a la actual y fue transferido a un centro de retención de menores infractores.
Fue mediante el oficio de colaboración de la Policía Ministerial de Durango, como se efectuó la captura de Hilda Rocío y José Antero, quienes tenían su domicilio provisional en las calles Matamoros y Luis Donadlo Colosio, en Hermosillo.
Al atender la petición institucional, las autoridades de Sonora se dieron cuenta que los involucrados encajaban con la descripción de las personas que participaron en el asalto cometido el 20 de julio, donde los dos hombres y la mujer entraron a la joyería, con la intención de robar.
No hay orden
Todavía no se ha consignado a los presuntos responsables del homicidio de José Jesús Luévanos Valdez de 28 años. Dos de los involucrados están arraigados en Ciudad Lerdo y los autores materiales y la intelectual, permanecen retenidos en Hermosillo, Sonora.
Las autoridades de la Subprocuraduría de Justicia cuentan con el tiempo suficiente para resolver la situación de los arraigados, Jesús Antonio Luna Vázquez, de 20 años y Marco Antonio Rodríguez González, de 21 años.
Con la detención de “El Anter”, “El Cactus” e Hilda Rocío y la imprevista confesión de José Antero como autor del crimen, Óscar Menchaca Lara, agente del Ministerio Público, está en posibilidades de consignar el caso y solicitar la orden de aprehensión contra los cinco involucrados.
Como se informó en su oportunidad, el brutal crimen se cometió porque “El Cactus” estaba molesto con su “cuñado”, quien ya no quería ningún tipo de relación con Hilda Rocío, pareja ocasional del joven que fue victimado a batazos y de 18 puñaladas.
Durante un mes y medio estuvieron prófugos los ahora arraigados en Sonora y fue mediante la declaración de Jesús Antonio y Marco Antonio, como se logró avanzar en la investigación y localización de los presuntos homicidas.
