También se decidirá quién sucederá al italiano Romano Prodi al frente de la Comisión Europea a partir de noviembre.
Bruselas, (EFE).- Los veinticinco líderes de la UE comenzaron hoy en Bruselas una cumbre en la que tratarán de cerrar los últimos capítulos de la primera Constitución europea, tras dos años de negociaciones.
La reunión de los jefes de estado o gobierno comenzó poco después de las 12.30 GMT, en la sede del Consejo de la UE, bajo la presidencia del primer ministro irlandés, Bertie Ahern.
A su llegada al edificio "Justus Lipsius", Ahern anunció que hará "todo lo posible" por el éxito de esta cumbre, en la que también debería decidirse quién sucederá al italiano Romano Prodi al frente de la Comisión Europea a partir de noviembre.
Prodi también hizo declaraciones a la entrada para expresar su abierto "optimismo" acerca de las posibilidades de que los Veinticinco alcancen un acuerdo definitivo sobre la Constitución.
Dijo ser "claramente optimista", aunque "quedan unos pocos puntos por discutir".
Al ser preguntado a quién prefiere como sustituto al frente del Ejecutivo comunitario, Prodi señaló, entre risas, que "ésa es la única decisión que yo no tendré que tomar".
Los dos líderes más esperados a la entrada de la reunión por los periodistas fueron el primer ministro belga, Guy Verhofstadt, y el luxemburgués, Jean-Claude Juncker, quienes pasaron delante de las cámaras sonriendo y saludando, pero sin despegar los labios.
Ambos primeros ministros son los que más suenan como candidatos oficiosos para presidir la Comisión Europea.
El primer ministro finlandés, Matti Vanhanen, dijo a la prensa que su país puede apoyar a "varios candidatos" para el cargo de presidente de la CE, aunque se negó a revelar la identidad de ninguno de ellos.
De la misma manera reaccionó la misma sueca de Asuntos Exteriores, Laila Freivalds, quien aseguró que tiene un candidato por el que el apostar, pero advirtió de que no diría a la prensa quién.
Además, se mostró "muy esperanzada" en que el Consejo Europeo sea positivo y se pueda llegar a acuerdos tanto en el nombramiento del sucesor de Prodi como en la aprobación del primera Constitución europea.
Por su parte, el ministro belga de Asuntos Exteriores, Louis Michel, siguió con su campaña de apoyo a la candidatura de su primer ministro para presidente del Ejecutivo comunitario.
Michel resumió las cualidades de Verhosfstadt en una sola frase: "es listo, es inteligente y con visión. ¿Se puede encontrar algo mejor?".
Preguntado sobre la oposición de Reino Unido e Italia a la candidatura del primer ministro belga, Michel dijo que "no se trata de hostilidad", pero no quiso pronunciarse sobre los motivos.
Por lo que se refiere a las discusiones sobre la Constitución, Michel aseguró que los líderes políticos de los Veinticinco tienen que llegar a un acuerdo pues en caso contrario "será realmente embarazoso".
El ministro consideró que no se está lejos de un acuerdo, el cual debe traducirse en una Constitución "fuerte y ambiciosa" y que no esté lejos del borrador redactado por la Convención.
El primer ministro de Eslovaquia, Mikulas Dzurinda, expresó la voluntad de su país de contribuir a encontrar un compromiso sobre el Tratado constitucional, pero dijo que "hay que ser paciente e ir paso a paso".