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BUENOS AIRES, ARGENTINA.- El premio Nobel de Economía 2001, Joseph Stiglitz, advirtió en declaraciones en Argentina que el presidente estadounidense George W. Bush impide ?dar sustancia? en las negociaciones del ALCA.
Stiglitz consideró muy probable que el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) termine en nada y, en todo caso, finalice como un acuerdo sin contenido.
?Quizá con otro presidente distinto de Bush haya sustancia. Pero con Bush está claro que no la hay. Porque no hay acuerdos en materia agropecuaria, ni de barreras no arancelarias, sobre dumping?, señaló el controvertido economista estadounidense.
Los 34 países del hemisferio que integran el proyecto tienen previsto concluir las negociaciones del ALCA a principios de 2005, para implementarlo a más tardar en diciembre de ese año, aunque las partes mantienen fuertes diferencias sobre el contenido del pacto.
Las más recientes reuniones realizadas en la central ciudad mexicana de Puebla y en Buenos Aires han terminado en sendos fracasos ante las fuertes diferencias en materia de subsidios agrícolas y el tema de las compras gubernamentales.
Stiglitz afirmó que, frente a ese escenario de liberación comercial hemisférica, países como Argentina deben impulsar de manera activa las exportaciones a China porque ese mercado necesita carne y soya, lo que permite una promoción más activa.
El ex funcionario del Fondo Monetario Internacional (FMI) ratificó sus críticas al funcionamiento del organismo ya que, por ejemplo, en el caso de la crisis argentina tuvo una enorme responsabilidad.
?Los mercados son los que tienen que ser más disciplinados porque es su dinero el que corre riesgo. Pero tuvieron pésimo criterio. Creo que el FMI empeoró las cosas (en Argentina), porque se supone que el FMI es el experto?, consideró.
El economista recordó que a fines de la década pasada el FMI puso al país sudamericano como un ejemplo para el resto de las economías ?lo que hizo más cómodo a los inversores volcar su dinero en las buenas épocas?.
Pocos años después, agregó, el Fondo se fue al otro extremo y empeoró las fluctuaciones al exagerar en sus críticas y sus alabanzas hacia Argentina.
Stiglitz hizo un fuerte reconocimiento al proceso de recuperación economía que registra este país, al que calificó de ?impactante?, aunque advirtió que eso no era imposible después de que pudo evitar la hiperinflación y la depresión sin fin.