Por tercera vez en los últimos seis meses tiene lugar el asalto a una institución bancaria en la ciudad de Torreón, como parte de un incremento generalizado en el rubro delictivo de asalto a negocios. Lo anterior es motivo de preocupación por lo que hace a este tipo de ilícitos en relación específica a los bancos, se trata de una práctica que parecía desterrada de nuestro medio local y que hoy vuelve por sus fueros.
Es cierto que debido a medidas internas de seguridad asumidas por los bancos, las circunstancias han cambiado y el monto de los eventuales botines se ha reducido en forma considerable. Lo anterior trae como consecuencia que los asaltos a bancos de hoy día sean ejecutados por delincuentes en solitario, por lo que han quedando atrás las antiguas bandas poderosas en armas y recursos que asolaban a dicho sector.
Lo expuesto no constituye mayor ventaja desde el punto de vista de la seguridad de las personas, porque aun bajo el actual esquema los empleados e usuarios de la banca corren riesgo en su integridad personal. Por ello es importante que las autoridades policíacas preventivas de Estado y Municipio, tomen cartas en el asunto, a fin de volver a la estadística cero asaltos bancarios que se mantuvo durante mucho tiempo.
El redoblar esfuerzos en materia de seguridad pública, también es un imperativo por lo que toca a los asaltos a negocios en el campo específico de tiendas de conveniencia. En el rubro en cuestión se han duplicado los asaltos en el último año y al respecto, las autoridades deben ofrecer una explicación sobre las causas de dicho aumento y proponer y ejecutar las medidas de solución que correspondan.