Las lluvias torrenciales y vientos huracanados dejaron a 16 personas desaparecidas y destruyeron más de 40 mil viviendas.
13 de agosto 2004.
PEKIN, (Reuters).-Uno de los peores tifones que ha sufrido China en décadas azotó el viernes la provincia de Zhejiang, en el sureste del país, causando la muerte a 115 personas y heridas a más de mil 800, informaron los funcionarios chinos.
Las lluvias torrenciales y vientos huracanados del tifón Rananim golpearon la costa el jueves por la noche, dejando a 16 personas desaparecidas, causando daños generalizados en la provincia arrocera y destruyendo más de 40 mil viviendas, dijo un funcionario de la oficina meteorológica provincial.
"Hacia las 5:00 p.m (09:00 GMT), el tifón había matado a 115 personas en Zhejiang y 16 más se encuentran con paradero desconocido", dijo un funcionario de la oficina de asuntos civiles en Zhejiang.
Un total de mil 800 personas resultaron heridas, entre ellas 185 en estado grave, dicen las autoridades. Más de 8.6 millones de personas se han visto afectadas por la tormenta, dijeron los funcionarios.
Es probable que la cifra de fallecidos aumente a medida que el tifón se dirija hacia el interior, en dirección a la provincia Jiangxi, dijeron las autoridades. La mayoría de los heridos fueron afectados por derrumbes de casas, agregaron.
Las autoridades han evacuado a unas 460 mil personas de las zonas costeras del sureste de la provincia de Zhejiang para ser trasladadas a lugares más seguros y escapar a la tormenta.
"Es el tifón más potente desde 1997", dijo un responsable de la oficina de asuntos civiles.
En 1997, casi 250 personas murieron cuando el tifón Winnie azotó la costa, causando nueve mil 800 millones de yuans en pérdidas económicas (unos mil 200 millones de dólares).
Rananim trajo lluvias torrenciales y vientos que superaron los 160 kilómetros por hora. El ojo de la tormenta tocó tierra a alrededor de las 8:00 p.m. (12:00 GMT) del jueves, cerca del pueblo de Wenling.
"Los carteles de las tiendas salieron volando y golpeaban los brazos y las piernas de la gente como si fueran cuchillos", dijo un médico en el Hospital Popular Número 1 de Wenling.
