EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Elementos de la Policía Preventiva del Estado (PPE), realizaron la detención de cuatro sujetos a quienes les aseguraron tres armas de fuego y un cuchillo, cuando circulaban por diferentes carreteras estatales que convergen con la Comarca Lagunera.
La primera de las detenciones se efectuó a las 21:30 horas del sábado 24 de abril, cuando por el bulevar San Pedro a la altura de la Deportiva, circula una camioneta Chevrolet pick up, modelo 1984.
Dicha unidad era conducida por Sergio Guerrero Solís de 43 años de edad, vecino del ejido San Esteban, municipio de San Pedro, Coahuila, a quien le aseguraron una pistola tipo escuadra, marca Industries, calibre .32, con cuatro tiros hábiles.
Horas más tarde, a eso de las 05:30 horas del domingo 25 de baril, agentes de la misma corporación interceptaron otra camioneta Ford pick up, modelo 1988, placas EN-76665 de Coahuila, por la carretera estatal 78, ramal Flor de Mayo, kilómetro uno, tramo Flor de Mayo.
En el vehículo, tripulado por quien dijo llamarse Eduardo Amaya Martínez, de 19 años de edad, se encontró una pistola tipo escuadra, marca Taurus, calibre .38 Especial, con tres tiros hábiles y seis percutidos, así como un rifle semiautomático M-1, calibre .30, con nueve cartuchos hábiles y un arma blanca con hoja de 20 centímetros.
Los detenidos y las armas aseguradas, quedaron a disposición del Ministerio Público de la Federación.
Prepotencia
Servidor público del que se ignora si es agente del Ministerio Público o elemento de la Agencia Federal de Investigación (AFI), impidió que tomara la foto, a uno de los detenidos con arma de fuego, al reportero gráfico de El Siglo de Torreón, al que además corrió de las instalaciones de esa dependencia federal.
La actitud asumida por el citado funcionario, no es nueva, pues de manera sistemática dichos empleados federales obstaculizan las labores de los medios de comunicación, con el argumento de que ?nosotros nunca les llamamos. Son ustedes quienes nos llaman?.
Para conocer la identidad del sujeto alto, de aproximadamente 1.80 metros de estatura, complexión robusta, tez blanca y ojos de color que usaba una cachucha, se intentó entablar comunicación con el responsable de prensa de la Procuraduría General de la República, José de Jesús Quintana Díaz, pero fue en vano.
De igual forma se hizo lo propio con Raciel López Salazar, encargado de la oficina, con iguales resultados.
Lo anterior demuestra que con la reubicación de la anterior delegada, María López Urbina, en la PGR se acabó la famosa política de ?transparencia? hacia los medios informativos y la ciudadanía.