EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Un agente de la Policía Ministerial resultó gravemente lesionado luego que fue atacado por una turba de malvivientes durante la madrugada del domingo en la colonia Valle Oriente. Para amedrentar a sus atacantes el ministerial disparó al aire, pero ni esto los ahuyentó.
Yuri Caleb Luévanos Gress, de 24 años de edad, elemento activo de la citada corporación, regresaba a su domicilio poco antes de la medianoche, luego de haber participado en el operativo de vigilancia realizado con las otras agrupaciones policíacas cuando fue interceptado por varios sujetos que lo despojaron de la cantidad de mil 200 pesos en efectivo, luego de propinarle severa golpiza que lo mantiene internado en el Hospital General del ISSSTE de esta ciudad.
Tras terminar con el operativo en mención todos los afectivos participantes se dispusieron retirarse a sus hogares para descansar, haciendo lo propio Yuri Caleb, a bordo de su vehículo particular, un Dodge Stratus, color azul, modelo 1995, sin placas.
Cuando circulaba por la calzada Valle Oriente a la altura de la calle Mitla, de la colonia Valle Oriente, sorpresivamente se le atravesó un sujeto que de no detenerse lo hubiera arrollado. Todo esto fue observado a varios metros de distancia por otros tres jóvenes.
El individuo, visiblemente intoxicado, le increpó en forma grosera al conductor el que casi lo atropellaba a la vez que se aproximaba a la ventanilla y cuando estuvo lo suficientemente cerca le propinó un golpe en el rostro.
Esto causó la molestia del policía que descendió del auto para reclamarle la agresión, situación que detonó la desigual riña, pues casi de inmediato le cayeron encima los otros tres sujetos que se hallaban retirados, golpeándolo con puños y pies en diferentes partes del cuerpo, sin darle oportunidad a defenderse.
Con el objeto de tratar de amedrentarlos, Yuri Caleb desenfundó su arma de cargo, una pistola tipo escuadra marca Smith y Wesson, calibre nueve milímetros con la que hizo un disparo al aire, lo que resultó peor, pues de distintos puntos del lugar donde ocurrieron los hechos salieron más jóvenes de aspecto “cholo” que se aproximaron para agredirlo.
Fue entonces que comenzó el forcejeo con uno de sus atacantes, accionando el arma durante el mismo hiriéndose en la mano derecha.
Con la sangre sintiéndola correr por su diestra, el agente ministerial corrió a fin de evitar que lo desarmaran y lo siguieran golpeando, por lo que buscó refugio en uno de los domicilios cercanos, donde pudo esconder el arma en un maguey en el patio trasero, no sin antes quitarle el cargador.
Hasta ahí llegaron alrededor de 15 vándalos quienes con lujo de violencia lo sacaron de la vivienda para llevarlo hasta la calle Jimulco, donde lo dejaron sobre el pavimento sin dejar de vapulearlo con todo lo que tenían a su alcance como palos y tubos, donde aprovecharon para despojarlo de dos carteras con la cantidad en mención así como documentos personales.
Al ver la paliza de la que era objeto, varios habitantes de la colonia intervinieron rescatando de la enfurecida turba al agente y ayudándolo a abordar un taxi Dodge Atos, color verde con blanco, de la línea Ecorrápidos, número económico 105, conducido por Luis Alonso Gallegos, vecino del mismo sector habitacional que lo trasladó a la clínica del ISSSTE donde quedó internado.
La versión del ministerial fue corroborada en todos sentidos por sus superiores, que además de dieron a la tarea de buscar el arma que no fue encontrada en el sitio donde señaló que la ocultó, por lo que se continuará con las pesquisas.
Demasiado tarde
Mucho después, cuando todo había concluido, hicieron su aparición los patrulleros de Seguridad Pública a bordo de la unidad 35345, que acudieron luego que se les reportó una riña en el lugar, pero sin lograr la captura de ninguno de los viciosos que atacaron al ministerial.
Los uniformados se encargaron de asegurar el vehículo del agente lesionado, trasladándolo a los patios de la corporación donde quedó a disposición del Jurídico.
Muy ocupado
A fin de obtener la opinión del titular de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), Francisco Javier Gutiérrez Pesquera, sobre el incidente, El Siglo de Torreón intentó entablar comunicación con el mismo pero fue inútil, el funcionario estuvo muy ocupado.
Temprano por la mañana del domingo, a Gutiérrez Pesquera le fue imposible atender el llamado de este medio de comunicación por estar abocado a importantes tareas, por lo que se le dejó el mensaje de que un representante acudiría a la oficina para entrevistarlo, pero al llegar ya se había retirado.
Inútilmente se intentó localizarlo por su celular, pues nunca respondió al llamado, por lo que hoy se hará un nuevo intento por cuestionarlo sobre el particular.
