Torreón, Coah.- La caprinocultura en la Región Lagunera con altos niveles de calidad es una actividad en expansión a la que se han sumado algunos productores con fuertes inversiones, ante la gran demanda de leche de cabra.
El Siglo de Torreón realizó una visita al establo Doña Margarita, ubicado en el kilómetro 14.5 de la carretera a Mieleras, en el municipio de Matamoros, Coahuila, dirigido por Antonio Hernández Nafarrate, quien condujo el recorrido.
El hato está compuesto por poco más de dos mil cabras hembras y machos, de la raza Saanen y Alpina, en una superficie de unas cuatro hectáreas, aunque el rancho cuenta también con varias más de nogales y una granja.
Hernández Nafarrete considera que la caprinocultura es una de las actividades con rentabilidad aceptable, dado que existe demanda de leche de parte de una empresa fabricante y exportadora de cajeta, pero exige calidad en el producto.
El establo cuenta con máquinas ordeñadoras, instalaciones para el confort del ganado, de tal forma que haya una mayor productividad y en la actualidad se obtienen dos mil litros de leche diarios promedio al día.
Brucelosis a la baja
Los casos de brucelosis tienden a bajar gracias a la campaña de vacunación implantada por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y los gobiernos de los Estados de Coahuila y Durango, informó José Antonio Martínez Vázquez, presidente de la Asociación de Caprinocultores de la Región Lagunera.
Tras reconocer que La Laguna alcanzó los primeros lugares a nivel nacional en cuanto a incidencia de brucelosis, expuso que se ha logrado una importante disminución y se continúa en esa línea, dado que esa actividad permite mantener a cientos de familias.
Destacó que la organización de los caprinocultores ha permitido, con el apoyo del Gobierno Federal y Estatal, la construcción de un rastro TIF (Tipo Inspección Federal) de corte y empaque, ubicado en la zona industrial de San Pedro, Coahuila y que estará terminado en unos dos meses más.
