Los problemas de atención a los pueblos indígenas ha provocado que 20 lenguas se encuentren en peligro de extinción.
04 de agosto 2004.
México (SUN-AEE).-En los últimos cuatro años 1.6 millones de niños y jóvenes se sumaron al rezago educativo del país, dado que el Instituto Nacional de Educación para los Adultos sólo logra atender a 300 mil de 700 mil menores de edad que no concluyen la educación básica, principalmente, por problemas económicos, aseguró el director de esa institución, Ramón de la Peña.
A este rezago se suma el de la atención a los pueblos indígenas, ya que en este momento existe otro millón 600 mil indígenas y jornaleros migrantes de entre seis y 17 años de edad que no asisten a la escuela, estimó Sylvia Schmelkes, coordinadora de Educación Intercultural Bilingüe.
Los problemas de atención a los pueblos indígenas "ha provocado que 20 lenguas se encuentren en peligro de extinción, debido a que el número de hablantes es reducido, no hay transmisión de la lengua entre generaciones, ni el sistema educativo tiene oportunidad de formar y educar a comunidades donde sólo hay 100 hablantes, tal como sucede con los kikapúes, en el norte del país".
Dijo que donde existe ese "peligro" es en el noreste, en lenguas como la de los cuñaís, pai-pais, y en el sur existe una comunidad de 100 hablantes y que son adultos mayores en Oaxaca.
"Es importante que nuestro sistema educativo nacional asuma la responsabilidad de favorecer y fortalecer las lenguas", afirmó la funcionaria.
"Las lenguas se están perdiendo porque no hay un uso público de esas lenguas, y porque no hay manera de que pasen a otra generación y se quedan en la utilización íntima".
Al encabezar la ceremonia de inauguración del Seminario Internacional Atención Educativa a Migrantes en México y España, la funcionaria de la Secretaría de Educación Pública explicó que en el país no existe un informe preciso sobre el número de niños migrantes, pero que se estima que entre 400 y 700 mil menores de edad salen cada año de comunidades de Oaxaca y Guerrero para ir a trabajar a las entidades fronterizas con Baja California, Sonora y Chihuahua.
Aseguró que la atención que se brinda en todo el sistema apenas abarca entre 6 y 10 por ciento de la población, pero al final los resultados "no son satisfactorios porque tenemos una eficiencia terminal cercana a cero".
Y es que ejemplificó que existen niños que por problemas con la migración de sus padres inician el primer año de primaria en su lugar natal, en noviembre se trasladan a otra región y logran inscribirse en ese grado escolar, pero no terminan el año ya que antes de los exámenes finales regresan a su población de origen. Así tenemos a niños que llegan a los 12 años y no aprobaron ni el primer año de primaria y el único camino que les queda es desertar.
Se trata, comentó, de reconocer que existen en nuestro país 3 millones de jornaleros agrícolas de los cuales la tercera parte emigra cada año en busca de oportunidades de empleo, y de éstos el 57 por ciento se lleva consigo a su familia, lo que implica que hombres, mujeres, niños y niñas laboren en los campos hasta 12 horas diarias.
Respecto a la educación superior, Sylvia Schmelkes dio a conocer que en febrero próximo se abrirá la Universidad Indígena de San Felipe del Progreso en el Estado de México y en este primer año se atenderá a 360 jóvenes; 70 por ciento de ellos son mujeres. Eso nos sorprendió muchísimo", apuntó.
La coordinadora de Educación Indígena dijo que los problemas presupuestales de la SEP han impedido la construcción de tres universidades más que se tenían planeadas para crear en este año en entidades como Guerrero, Chiapas y Tabasco. Indicó que como son instituciones pequeñas "los recursos que se requieren son escasos, alrededor de 20 millones de pesos, que no hemos podido encontrar".
Antes, Ramón de la Peña, director del INEA, reconoció que las acciones que han emprendido para reducir el rezago educativo en el país sólo les permiten atender a 300 mil niños, adultos y jóvenes, pero que cada año se están sumando 700 mil más al rezago nacional, entre los que no logran la alfabetización, no terminan la primaria ni la secundaria.
Anunció que en los próximas semanas el INEA entregará certificados de bachillerato y a nivel técnico a poco más de 70 jóvenes y adultos migrantes que se encuentran presos en la cárcel de Cibolá, acusados de narcotráfico.