El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Federico López Hernández, socio de la firma Gossler comenta que la reforma fiscal 2005 es mucho más recaudatoria a la que se ha tenido en otros años, dado que muchas empresas en el siguiente año verán impactadas sus operaciones por los cambios hechos al Impuesto Sobre la Renta (ISR) y al Valor Agregado (IVA).
La reforma aprobada antes del 15 de noviembre de 2004 dentro de la Ley de Ingresos de la Federación propuso cambios significativos en el ISR e IVA, así como también planteó la creación del impuesto Cedular.
Aunque año con año el país se ha quejado que la Reforma Fiscal nunca ha sido integral, Federico López afirma que para 2005 será aún mucho más recaudatoria al aprobar cambios que impactarán directamente a las empresas. La eliminación de la deducción de las compras por el costo de ventas es la reforma que más inquietud ha generado dentro del sector empresarial.
Explica que a diferencia al método aplicado hasta ahora, los empresarios deberán deducir de los ingresos el costo de lo que se vende y no de las compras como tal. El especialista comenta que bajo el otro esquema se podía anticipar el restar dicho concepto de costo de producción al momento de la compra y no de la venta de los bienes.
El comentario hecho por Federico López es que dichos ajustes sí impactarán en los resultados fiscales de las empresas, ya que no se podrá diferir estas compras a futuro, sino al momento de realizar la operación.
Nada nuevo
El especialista fiscal comenta que dicho sistema ya existía hace 17 años, sin embargo, el cambio se dio debido a los altos niveles de inflación en el país, motivo por el cual la autoridad fiscal permitió una pronta deducibilidad para tener precios actualizados.
Refiere que en 1987 se reportaba una tasa de inflación de un diez por ciento, afectando el valor de las mercancías. Sin embargo, hoy en día, con niveles de un dígito, la Secretaría de Hacienda considera que el costo de venta actualmente no se verá impactado y esta en todo momento a valor actualizado.
Federico López reconoce que el argumento de la autoridad fiscal es bueno y valido, aunque se genera un poco de inquietud al no poder las empresas tomar este elemento de compras como regulador de la utilidad fiscal. No obstante a ello, opina que se abren otros espacios y situaciones de complejidad en cuanto al manejo del costo para los negocios y para el propio fisco.
La falta de un sistema de costos en todas las empresas podría generar problemas para el cálculo correspondiente y por ello les incomode las reformas, particularmente las pequeñas y medianas empresas. Aclara que a las personas físicas que realicen actividades empresariales no les afectará dichos ajustes.
Aunque el entrevistado reconoce que la Secretaría de Hacienda podrá incrementar la recaudación de impuestos, precisa que existen mecanismos que permiten que dicho pago pueda realizarse en un plazo de 12 años, atenuando un poco dicho impacto. Aclara que lo anterior dependerá del tipo de empresa y de la rotación de mercancías que tenga. Ejemplifica el caso de un negocio con una rotación rápida, la opción es diferir el pago a cuatro años, en caso contrario, con un movimiento de mercancías lento, a 12 años.
Añade también que debido a que las disposiciones que regulan el esquema de deducción tienen problemas de redacción y precisión, originando la promoción tal vez de juicios de amparo al generar una inseguridad jurídica.
