La medida será cometida a votación en el Senado
EFE
WASHINGTON, EU.- La Cámara de Representantes aprobó ayer un proyecto que reforma los servicios de espionaje de Estados Unidos para impedir que se repitan atentados similares a los del 11 de septiembre de 2001, que se cobraron la vida de unas tres mil personas.
El proyecto, que combina los servicios de 15 dependencias de espionaje e intensifica la vigilancia fronteriza, fue aprobado por 336 votos a favor y 75 en contra.
La iniciativa, que también permite la intervención de comunicaciones de presuntos terroristas, será sometida a votación del Senado hoy y, descontada su aprobación por la mayoría republicana en esa cámara, será enviada de inmediato al presidente George W. Bush para su promulgación. ?Ha sido un gran esfuerzo para asegurar que no ocurra otro 11-S?, dijo el presidente del Comité de Normas de la Cámara de Representantes, David Dreier.
?Ahora tenemos una estructura que garantizará que tenemos la capacidad para enfrentar los conflictos donde éstos ocurran?, añadió.
La medida significa la mayor reestructuración de los servicios de espionaje de Estados Unidos (EU) desde la creación de la Agencia Central de Inteligencia de EU (CIA, por sus siglas en inglés) tras la II Guerra Mundial.
La iniciativa crea un Director de Inteligencia Nacional y pone fin a divergencias que habían surgido por la autoridad del Departamento de Defensa para recoger información destinada a ayudar a sus comandantes en el campo de batalla.
Este director de inteligencia nacional será el principal consejero de la Casa Blanca en materia de espionaje y tendrá responsabilidad principal sobre los 15 organismos encargados de recoger información.
El plan de reforma incorpora la mayoría de las recomendaciones presentadas en julio de este año por una comisión independiente que investigó los atentados del 11-S.
Entre ellas figuran medidas para fortalecer la seguridad fronteriza, incluido el uso de aviones no tripulados en la frontera con Canadá, el despliegue de diez mil nuevos agentes en las fronteras por un periodo de cinco años, así como la penalización del contrabando de inmigrantes ilegales.
Asimismo, amplía las medidas para combatir el terrorismo internacional y su financiación, incluido una mayor vigilancia de las transacciones financieras a través de las fronteras, aplica un sistema de identificación biométrica de los visitantes al país y castiga el tráfico o posesión de armas de destrucción masiva.
?Hemos cumplido la tarea. El proceso ha funcionado. Al final de este día hemos dado un paso gigantesco en la aplicación de una Ley que hará que Estados Unidos sea más seguro y que su población se sienta orgullosa?, dijo el republicano Dennis Hastert, presidente de la Cámara de Representantes.
Bob Mendéndez, presidente del grupo demócrata de la Cámara, afirmó que la aprobación es un paso para impedir ataques terroristas y ?aunque no es perfecto, resuelve los fallos clave que permitieron que tuvieran éxito los ataques del 11-S?.
?Este proyecto devolverá la fe en un sistema que necesitaba de la reforma y de que se le mejorara para enfrentar los desafíos del terrorismo global?, dijo Menéndez.
