Agencias
NUEVA YORK, EU.- Una nueva tormenta de nieve azotó ayer el noreste de Estados Unidos, paralizó varios estados, provocó el cierre de colegios y organismo oficiales, y ocasionó retrasos y cancelaciones en los aeropuertos.
La tormenta, que comenzó la noche del martes, es la cuarta que se produce en las últimas semanas, lo que ha convertido a este enero en el más frío desde hace 30 años.
Las regiones más afectadas son Pennsylvania, Nueva Jersey, Nueva York, Connecticut, Rhode Island y Massachusetts, donde los coches y las calles amanecieron cubiertos de nieve y se decretó la alerta para los conductores, recomendando extremar las precauciones.
Desde el pasado fin de semana, cuando el tiempo comenzó a empeorar, al menos han muerto 52 personas, la mayoría en accidentes de tráfico, a causa de la nieve, el hielo y el frío, registrado desde Kansas hasta la Costa Este, según reportes de las autoridades.
Debido a la tormenta, que en algunos puntos de Nueva York como Central Park dejó 20 centímetros de nieve, las clases fueron canceladas en varios estados, incluyendo esta ciudad, con el sistema escolar más numeroso del país, con 1.1 millones de estudiantes.
En Maryland, los niños más pequeños cumplieron ayer su tercer día consecutivo sin colegio debido al mal estado de las carreteras.
En los tres aeropuertos de la ciudad de Nueva York, Newark, La Guardia y JFK, se cancelaron alrededor de 200 vuelos y otro centenar sufrió retrasos, dejando a los pasajeros varados en sus pasillos, según datos de la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey.
Autoridades de la ciudad dijeron que durante este invierno se han gastado 21 millones de dólares en remover la nieve, un millón más de lo estimado en el presupuesto para toda la temporada, y han usado 250 mil toneladas de sal para prevenir que se formen placas de hielo.
Unos dos mil 200 empleados municipales trabajando desde la noche de ayer para limpiar de nieve las carreteras, calles y aceras. El servicio de autobuses registra numerosos retrasos, mientras que los trenes de cercanías funcionan con horario de fin de semana.
Los turistas que siempre llenan la ciudad se vieron sorprendidos por la tormenta. “Nunca había visto tanta nieve fuera de una estación de ski”, dijo un turista procedente de Australia. En algunos puntos del Estado de Nueva York la nieve caída alcanzó los 32 centimetros.
