Notimex
México, DF.- El año pasado, al igual que en 2002, la cuenta corriente de la balanza de pagos de México se contrajo para alcanzar un déficit de nueve mil 150 millones de dólares, monto equivalente al 1.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
El Banco de México (Banxico) informó ayer que tales datos se comparan con los déficits observados en 2001 y 2002 de 18 mil 158 y 14 mil 53 millones de dólares, que como proporción del PIB se ubicaron en 2.9 y 2.2 por ciento, respectivamente.
Explicó que la disminución del déficit de la cuenta corriente en 2003 respecto al año previo obedeció principalmente a un menor déficit comercial -que a su vez fue reflejo de un aumento en el valor de las exportaciones petroleras- y a un mayor superávit en la cuenta de transferencias.
Este último rubro obedeció al importante incremento que registraron los ingresos por concepto de remesas familiares, resalto el instituto central.
Señaló que la reducción del saldo deficitario de la cuenta corriente también es atribuible a la modesta expansión que registraron el año pasado el gasto interno y la producción de la economía nacional.
A su vez, el lento crecimiento de ambos agregados determinó que las importaciones de mercancías tuvieran un aumento moderado en el año.
El Banco de México precisó que el déficit corriente de 2003 fue resultado neto de la combinación del déficit en las balanzas comercial (cinco mil 603 millones de dólares) y de servicios factoriales (12 mil 808 millones de dólares).
Así como de los servicios no factoriales (cuatro mil 467 millones de dólares) y de un superávit en la balanza de transferencia (13 mil 728 millones de dólares).
Por otra parte, el instituto central informó que la balanza comercial arrojo el año pasado un saldo deficitario de cinco mil 603 millones de dólares, inferior a los siete mil 916 millones de dólares 2002.
A su interior, el valor de las exportaciones resultó de 165 mil 355 millones de dólares, lo que implicó un crecimiento anual de 2.9 por ciento.
Esta alza se derivo por el aumento de 28.7 por ciento de las exportaciones petroleras y de 0.3 por ciento de las no petroleras. La falta de dinamismo de éstas últimas se debió a la escaza fortaleza durante la primera parte del año de la demanda externa particularmente de Estados Unidos.
Además de que se ha debilitado la competitividad de la economía mexicana ante la ausencia de avances en la adopción de Reformas Estructurales.
En tanto, agregó, el valor de las importaciones de mercancías sumó 170 mil 958 millones de dólares en 2003, lo que implicó un incremento anual de 1.4 por ciento, reflejo de la modesta expansión de la producción y el gasto agregado interno.
También afecto la disminución que registraron las exportaciones manufactureras para cuya fabricación se utilizan insumos importados.
La tasa referida fue resultado de la combinación de crecimientos de 1.6 y 2.1 por ciento de las importaciones de bienes de consumo e intermedios, respectivamente, además de una contracción de 3.6 por ciento de las de bienes de capital, que acumularon tres años consecutivos con caídas.