15 de abril 2004.
MEXICO, D.F.,(SUN-AEE).- La defensora de derechos humanos, Rosario Ibarra de Piedra, fue amenazada con ir a la cárcel si no declaraba en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, en el juicio que se le sigue a Miguel Nazar Haro, ex titular de la Dirección Federal de Seguridad (DFS), preso en el penal de Topo Chico por el delito de desaparición de Jesús Piedra Ibarra.
De acuerdo con el testimonio de la luchadora social, el secretario de Acuerdos del Juzgado Cuatro de Distrito en Materia Penal, Zenaido Orozco Contreras, la amenazó ayer durante el desahogo de la diligencia sobre el caso, toda vez que Ibarra había manifestado de inicio que no declararía ya nada sobre el caso de su hijo porque eso había hecho durante los últimos 29 años y no volvería a hacerlo más.
Ante la respuesta, el secretario de Acuerdos le dijo que si no declaraba se vería obligado a forzarla. Ella le dijo que cómo lo iba a hacer, "¿me van a torturar?", le preguntó a Orozco.
Éste le respondió que si se negaba a declarar él la podría privar de su libertad, es decir, "me encarcelaría".
"Para no parecer intransigente, acepte contestar las preguntas en las que se me cuestionó si conocía al señor Nazar Haro, si era familiar mío y si sentía odio o rencor en su contra, indicando que si lo conocía, que no era familiar mío y que tampoco lo odiaba", aseveró.
Sin embargo, precisó la activista de derechos humanos, el secretario de Acuerdos anotó mis respuestas en forma sesgada, indicándome en que momento debía de detenerme y haciendo otra pregunta distinta.
Esto comenzó a molestarla por lo cual abandonó el juzgado, indicó en un comunicado