El Índice Global de Actividad Económica está marcando un ritmo de crecimiento de la economía cada vez mayor desde septiembre del año pasado.
El crecimiento en enero fue de 2.3 por ciento. Según los expertos, esta tendencia se conservará en este nivel durante el primer semestre del año, para crecer, en el segundo semestre, al tres y cuatro por ciento.
En la encuesta que el Banco de México hace cada mes, el 90 por ciento de los encuestados dijeron que dentro de un semestre las cosas estarán mejor.
El ritmo de crecimiento de las exportaciones manufactureras ha crecido en seis por ciento en los últimos cuatro meses.
Hay también un crecimiento ya perceptible en la inversión. Todavía no hay datos para este año, pero el año pasado creció ocho por ciento. Los salarios ganaron un 1.7 por ciento en términos reales.
Las ventas de las tiendas departamentales crecieron siete por ciento en febrero e incorporando a las demás tiendas en este estudio, las ventas tuvieron un crecimiento del tres por ciento.
Si es cierto que China nos ha desplazado del segundo lugar como país exportador hacia Estados Unidos, esto ha sucedido por el crecimiento de las exportaciones chinas, no porque las exportaciones mexicanas hayan disminuido.
Esta mejoría de las finanzas nacionales se está dando debido a la mejoría de la economía americana. Cincuenta expertos encuestados por The Wall Street Journal señalan para Estados Unidos, un crecimiento económico del 4.5 por ciento para el primer trimestre del año.
En este momento el único nubarrón negro para México sería una turbulencia en la economía americana provocada por los resultados de las elecciones de fin de año que sin duda repercutiría negativamente sobre las finanzas mexicanas.
La perspectiva es moderadamente optimista, porque en la actual situación, México necesitaría un crecimiento anual de entre cinco y seis por ciento, para poder generar los empleos que el país necesita, y no parece que estén dadas las condiciones para que esto suceda.
__________
La Comisión Federal de Electricidad está haciendo los estudios para dos grandes presas. Se trata de las licitaciones para la construcción de dos hidroeléctricas, una en La Parota en el Estado de Guerrero, y la otra en La Yesca, sobre el río Santiago, en Nayarit, ampliación de la hidroeléctrica de El Cajón. Los estudios para la presa de La Parota ya están concluidos y los de la Yesca estarán listos a principios del año que viene.
Cada uno de estos proyectos tendrá un costo de novecientos millones de dólares, y la capacidad de producción de ambos será superior a la capacidad de El Cajón.
Estas dos grandes presas se comenzarían a construir en este sexenio, para terminarse después de 2006.
Por el contrario, se hará todo lo posible por terminar la hidroeléctrica del Cajón en este sexenio, cuando en un principio se había calculado que se terminaría en el 2007.
La semana pasada estuvo presente el presidente Fox en el desvío del río hacia uno de los túneles, para permitir el inicio de la construcción de la cortina, y fue allí donde publicó la noticia de las dos nuevas presas, y del esfuerzo para terminar El Cajón en el año 2006. Hasta ahora la construcción de la presa de El Cajón tiene un avance del 14 por ciento.
__________
Desde que se firmó el Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN) con Estados Unidos, había una controversia que ya se había presentado en los Tribunales del Tratado. Por parte de México la queja era que Estados Unidos, violando el Tratado, se negaba a aceptar los excedentes mexicanos de azúcar, permitiendo el ingreso únicamente de seiscientas mil toneladas por año; y Estados Unidos planteaba la controversia, acusando a México de cobrar el 22 por ciento de impuesto a la importación de alta fructuosa. Este arancel había sido impuesto por México como compensación por la negativa de Estados Unidos a permitir el libre paso de azúcar mexicana al imponer una cuota limitatoria. Hace un mes, parecía que México había perdido la batalla, porque la corte decretó que México debía suprimir el arancel que imponía a la importación de fructuosa, sin sentenciar la controversia mexicana de obstaculización al libre mercado del azúcar.
El conflicto ya terminó. A partir del mes de octubre de este año, Estados Unidos elimina la cuota de seiscientas mil toneladas, y México suprime el arancel del 22 por ciento a la fructuosa.