QUERÉTARO, QRO.- Los hermanos, Óscar e Iridia Salazar, cumplieron con gallardía el objetivo de clasificar a los Juegos Olímpicos Atenas 2004 en la eliminatoria de taekwondo para el Continente Americano, que se realiza en esta ciudad.
Con ello, concretaron el sueño de representar a México en la justa veraniega, que se llevará a cabo en agosto próximo en la capital de Grecia.
Desde el inicio de las contiendas, ambos estuvieron a la altura del preolímpico, con seguridad y velocidad en sus combates los hermanos dieron a México los pases a Atenas 2004 que en los pasados Campeonatos del Mundo de París, Francia, no habían logrado.
En medio del apoyo de la afición que se dio cita en el Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez, Óscar Salazar (en la división de menos de 58 kilogramos) comenzó a delinear el camino a la clasificación y desde el momento en que se paró en el tatami impuso condiciones para llevarse el triunfo ante el guatemalteco Federico Rosal por 4-0.
Para la segunda pelea, y ya con mayor tranquilidad, Salazar Blanco, campeón centroamericano en San Salvador 2002, dio cuenta del boliviano Paul Zabaki por 8-0 y quedó de manifiesto su dominio, para que una vez clasificado a la semifinal derrotara al estadounidense Charles Smith por 4-0 y con ello pasar a la final. Ya con el pase a los Juegos Olímpicos, Óscar Salazar, plata en el Abierto de Holanda en 2000, salió con mayor tranquilidad y sólo en espera de que el brasileño Marcel Menceslau tuviera un error para aniquilarlo.
Al final de la contienda de tres etapas a tres minutos, Óscar Salazar se alzó con el triunfo por 2-1.
En lo que respecta a Iridia, subcampeona del mundo en Alemania 2003, en la división de menos de 57 kilogramos, no tuvo problemas para ganar sus dos combates; primero se impuso a la ecuatoriana Elizabteh Franco por 4-0, y luego a la colombiana Paola Delgado por 5-0. Ya en la final, la estadounidense Nia Abdallah decidió no salir y con ello dar a la mexicana el primer sitio.
De esta manera, los hermanos Óscar e Iridia Salazar, quienes tuvieron como entrenador a su padre Reinaldo, cumplieron con su meta de estar en Atenas y también en hacer historia como hermanos que van a una justa veraniega en un mismo deporte.
En basquetbol en Berlín 1936, asistieron los hermanos Carlos y Victor Borja; en Londres 1948, Fernando y José Rojas también en basquetbol; en clavados, Joaquín y Antonio Capilla en Melbourne 1956 y más reciente en el nado sincronizado con las hermanas Erika y Lilián Leal, quienes asistieron a Atlanta 96 y Sidney 2000.
Los Salazar van a Atenas
Para el taekwondoín Óscar Salazar, conseguir el oro en el Preolímpico de América y con ello el boleto a los Juegos Olímpicos Atenas 2004 significó una revancha, pues en 2000 el estadounidense Charles Smith lo eliminó en semifinales y ahora el panorama fue al revés.
Comentó que la idea era prepararse mejor en este ciclo olímpico, luego de quedarse cerca de representar a México en los Olímpicos de Sydney 2000, por lo que ahora el trabajo y la preparación fue fundamental, además de contar con el apoyo de su padre, Reinaldo Salazar, como nuevo entrenador.
"Hace cuatro años, en este mismo preolímpico regional me enfrenté en las semifinales con el estadounidense, con quien perdí.
?Yo fui el único que no calificó y ahora la intención era lograr el boleto en este evento que era mi última oportunidad", manifestó.
Indicó que se siente orgulloso porque el trabajo que empezó a realizar al lado de su padre y entrenador fue motivante para poder conseguir su objetivo, por lo que ahora sabe que su preparación deberá ser más intensa para lograr importantes resultados en la justa veraniega, de agosto próximo.
"Es un orgullo sacarme la espinita, sabía que este ciclo olímpico era el mío, ahora consigo mi boleto junto con mi hermana Iridia Salazar, de quien he aprendido mucho, además de tener las veinticuatro horas a un entrenador que está al pendiente de nosotros, confía en nosotros y el trabajo lo hace de corazón", agregó.
Expuso que ahora el siguiente paso es continuar con sus entrenamientos y sus próximas competencias que estarán por definir, ya que el objetivo es llegar lo mejor preparado a Atenas.
"Tenemos que seguir preparándonos. El trabajo que se está realizando con el profesor Óscar Mendiola es bueno, ya que los resultados que tuvimos en este evento internacional son importantes y ahora tenemos que continuar por ese camino. Creo que sin trabajo no hay milagros", añadió.
Por su parte, Reynaldo Salazar dijo que el primer paso se dio, luego de aceptar entrenar a sus hijos, ya que esa fue una de las mejores razones.
"Todos tienen sueños, entonces que mejor que ayudar a mis hijos, quienes ya están dentro de la delegación nacional para los Juegos Olímpicos. Gracias a Dios se dieron las cosas como se habían planeado", concluyó.