RECHAZO| REALIZAN CIUDADANOS Y TRANSPORTISTAS MARCHA CONTRA LA REESTRCTURACIÓN DE RUTAS
Sin temor a ser atropellados, hombres, mujeres y niños niegan el paso a camiones recolectores de basura
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Alrededor de mil 500 ciudadanos matamorenses participaron en una marcha de la alameda Zaragoza a la Presidencia Municipal de Torreón con el objetivo de obtener una audiencia con el alcalde, Guillermo Anaya Llamas, para expresarle su inconformidad ante la salida de los autobuses suburbanos del centro, que se maneja en el proyecto de reestructuración de rutas.
La cita fue a las diez de la mañana en la Fuente del Pensador, donde arribaron 45 unidades de las diversas rutas suburbanas de Matamoros, con unos 40 ciudadanos a bordo cada una: amas de casa y campesinos en su mayoría, convocados días antes a través del perifoneo en el Municipio.
Apenas llegaron, comenzó la repartición de lonches y refrescos. Entrevistados al momento de su llegada, diversos campesinos admitieron desconocer las causas de la marcha y sólo atinaban a decir que se trataba de un movimiento social, mientras que otros explicaban, en tono molesto, que se oponían al proyecto de modernización de las rutas urbanas y suburbanas.
A la marcha se unieron también la edil del PRI, Consuelo Rivas Gleasson, regidores y titulares de diversos departamentos en el Ayuntamiento de Matamoros, incluyendo al director de Sistema Municipal de Aguas, (Simapa), Gabriel Gómez Ruiz, además de los presidentes de los comités municipales de este partido en Torreón y Matamoros, Marco Antonio Mora Varela y Juan Carlos Ayup Guerrero, respectivamente, quienes caminaron al frente del movimiento.
Durante la caminata, el perifoneo calificó de nefasto y perverso el proyecto de reestructuración de rutas aprobado por el Cabildo de Torreón, apoyado por múltiples cartulinas donde los ciudadanos manifestaban su rechazo.
Las enormes mantas parecían contradecir estas expresiones, pues en ellas se apoyaba la modernización de las unidades y mayor calidad en el servicio, mas no la salida de los camiones suburbanos del Municipio, ya que esto perjudicaría a los usuarios matamorenses.
Atrás de las más de mil 500 personas, venían los concesionarios de los Autobuses Rojos de Matamoros y Transportes Congregación Hidalgo, que rechazaron estar apoyando el movimiento, aun cuando sus camiones bloquearon la avenida Matamoros afuera de la Presidencia Municipal de Torreón.
?El pueblo unido jamás será vencido?, decían los caminantes mientras se acercaban al edificio del Ayuntamiento, donde les esperaba Carlos Augusto Bracho González, de Atención Ciudadana. Sin tomarle en cuenta, los manifestantes entraron a la Presidencia y comenzaron a tocar en la puerta de la oficina del alcalde, Guillermo Anaya Llamas.
Los agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) aseguraron que el presidente municipal no se encontraba en el edificio, pero los matamorenses les ignoraron y a gritos y empujones, irrumpieron en la Sala de Cabildo, que se encontraba vacía.
Bracho González explicó a los ciudadanos que Anaya Llamas no se encontraba y que les atendería el secretario del Ayuntamiento, Alfonso Tafoya Aguilar, pero los pobladores fueron tajantes en su rechazo, pues según comentaron, ?él sólo nos da largas?.
Las agresiones fueron subiendo de tono y los gritos no se hicieron esperar. Cerca de las 11:30 horas los manifestantes comenzaron a desesperarse ante la negativa de Guillermo Anaya para dialogar y empezaron a golpear los escritorios con los puños al tiempo que pedían la presencia del alcalde.
Los inconformes bloquearon todos los accesos de la Presidencia Municipal, al momento que ingresaban en la Sala de Cabildo los regidores comisionados en Autotransporte, Mayela Sordo y Juan Antonio Zapata, así como la titular de esta dependencia, Sandra Mijares y el secretario del Municipio, pero su presencia sólo enardeció aún más a la multitud, que al grito de ?fuera, fuera? arrancaron las plantas de la jardinera ubicada en el centro del salón y las arrojaron a los funcionarios, mientras que les empujaban para que salieran.
En opinión de Tafoya Aguilar, el movimiento era de un grupo de priistas que se opone al crecimiento de Torreón. Por su parte, Mora Varela negó tal acusación y dijo que si las autoridades querían verlo de esa forma era para tergiversar la inconformidad de toda una población que se vería afectada con los cambios en el proyecto de reestructuración de rutas.
El dirigente del PRI en Torreón intentó tranquilizar a la gente en diversas ocasiones pero no obtuvo respuesta, pues los liderazgos ya habían sido rebasados por la multitud.
Tras dos horas de esperar por Anaya Llamas y sin obtener una solución, los ciudadanos buscaron hacerse escuchar a través de medidas más severas de presión y partieron hacia el bulevar Torreón-Matamoros.